Casi el 86 % de los jóvenes andaluces conviven todavía en el domicilio familiar. EFE/J.L. PINO/ARCHIVO

Casi el 86 % de los jóvenes andaluces conviven todavía en el domicilio familiar

Sevilla (EFE).- El 85,9 % de los jóvenes andaluces convivían en el domicilio familiar a finales de 2022, lo que sitúa a la comunidad autónoma en el quinto puesto de las regiones con menos jóvenes emancipados. Solo el 14,1 por ciento, según los datos difundidos este viernes por el Observatorio de Emancipación.

En el 2022 la emancipación residencial de la población joven de Andalucía, colectivo formado por 1.310.342 personas, siguió disminuyendo, aunque sin alcanzar los mínimos históricos de 2020.

Los jóvenes que alquilaban piso (30 %) eran, en proporción, menos que la media española (37,9 %). Y es la vivienda en propiedad (55,1 %) la forma más común de emancipación en esta comunidad autónoma.

Además, la compra mediante hipoteca es mucho más frecuente que en el resto de España. Y tan solo el 19,4 % de las personas jóvenes emancipadas vivía a finales de 2022 en solitario.

Tal y como ha sucedido en todas las comunidades autónomas, la reforma laboral ha conllevado una notable reducción de la temporalidad en el empleo. En Andalucía muy pocas personas jóvenes estaban trabajando y, cuando lo hacían, era con un mayor riesgo de subocupación.

Salario medio

El salario medio apenas llegaba a los mil euros netos mensuales y en categorías ocupacionales poco cualificadas, en las ocupaciones “elementales” y la restauración esencialmente, según el Observatorio.

En el conjunto del Estado, el balance refleja que los jóvenes siguen retrasando la edad de emancipación familiar hasta los 30 años, la más alta de las últimas dos décadas. Y cuando dan el paso tienen que emplear más del 80 % de sus ingresos a pagar el alquiler de esa vivienda si quieren vivir en solitario.

“Nos emancipamos cuando dejamos de ser jóvenes”, destaca el Consejo de la Juventud en su último barómetro a cierre de 2022. Este muestra un estancamiento de la tasa de emancipación juvenil en el 15,9 %, la mitad que la de la Unión Europea -31,9 %-.

En la víspera del Día de la Juventud, los datos del Observatorio sitúan la edad media de emancipación en 30,3 años. Y concluyen que tener estudios superiores e incluso trabajo, no es suficiente para acceder a una vivienda, comprada o de alquiler.

“La edad de emancipación ha subido a los 30 años, la cifra más alta desde que el observatorio publica este informe, hace 20 años”. “Sobrepasamos la cifra que define ser joven, en España independizarse es prácticamente una quimera”, ha explicado este viernes Andrea González Henry, presidenta del Consejo de la Juventud de España, en la presentación del estudio. EFE