Zaragoza (EFE).- La consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón mantiene abiertas todas las hipótesis sobre la causa de la presencia de quistes del protozoo Cryptosporidium en el río Queiles, que abastece a Tarazona, donde se originó un brote de gastroenteritis que afecta ya a 452 personas, también de los municipios de Torrellas, Novellas y Los Fayos.
Las inspecciones llevadas a cabo por efectivos de la Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y agentes del Seprona de la Guardia Civil en el río Queiles casi hasta su nacimiento han sido hasta la fecha infructuosas. No han detectado vertidos o “actividad ilícita”, como ha asegurado el consejero de Sanidad, José Luis Bancalero.
Bancalero ha comparecido en una rueda de prensa desde el Ayuntamiento de Tarazona, tras una reunión con el alcalde y representantes de otros organismos, entre ellos de la Consejería de Agricultura, para analizar los diferentes hitos y actuaciones llevados a cabo desde el 11 de septiembre cuando se notificó el brote a Salud Pública desde Atención Primaria.
Los quistes de este protozoo, que se encuentran en el intestino humano o del ganado, pueden llegar a contaminar las aguas y causar brotes comunitarios. Fueron detectados primero en las heces de los afectados y después en el agua de boca. A partir de ahí comenzaron los análisis desde la captación y posteriormente a largo del río para descubrir el foco.
El consumo de agua sigue restringido
Bancalero ha advertido no obstante de que “se puede llegar a dar un escenario sin haber detectado el foco”, ya que incluso se ha podido producir por arrastre de lluvias torrenciales.
Las autoridades sanitarias mantienen por tanto la recomendación seguir restringiendo el consumo de agua de boca hasta que los resultados den negativo en la red.

En este sentido, ha anunciado que el trabajo de la depuradora ha permitido reducir en 24 veces la presencia del protozoo en la captación de agua para el consumo de boca. Pero ha advertido de que este tipo de infraestructura “no está preparada para la eliminación de la bacteria”.
Además, se está trabajando con agua a presión. “Pero de poco nos sirve poner medidas para destruir el protozoo si sigue llegando a las tuberías”, ha lamentado el consejero de Sanidad aragonés. Bancalero no descarta ninguna hipótesis sobre filtraciones o vertidos como origen del protozoo.
Como comunidades limítrofes con el territorio afectado por el brote, desde Aragón se ha mantenido contacto directo con la Consejería de Sanidad de Castilla y León y se ha puesto en conocimiento del Gobierno de Navarra, que también está realizando actuaciones dentro de su ámbito. También se ha notificado al Ministerio de Sanidad y al de Transición Ecológica que mañana, ha dicho, darán respuesta a la colaboración solicitada por el Gobierno de Aragón.
Por su parte, la Consejería de Agricultura de Aragón realiza inspecciones, dado que este protozoo afecta a todos los mamíferos y se puede transmitir por cualquier otro animal. También puede contagiarse de persona a persona. Por eso, Bancalero ha insistido en la importancia de la higiene y el lavado de manos.