Santa Cruz de La Palma (EFE).- El consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, ha anunciado este lunes que, por falta de consenso entre las administraciones, no se ejecutará por la vía de emergencia el segundo tramo de la carretera de la costa, en La Palma, que ha generado contestación social de los vecinos de los barrios afectados.
Sebastián Franquis ha recordado que el pasado 13 de febrero emplazó a las administraciones afectadas por la erupción, los ayuntamientos de Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte, y al Cabildo palmero, a que llevaran a pleno su posición al respecto de ese tramo de carretera, y, ante la falta de acuerdos, “no se llevará a cabo por vía de emergencia”.
El consejero regional ha explicado que “era fundamental que hubiera consenso entre las administraciones implicadas, como hemos hecho en todos los asuntos que hemos decidido en el proceso de reconstrucción”, y ha señalado que ese consenso sí se logró en otros problemas “como en el decreto de construcción en suelo rústico para afectados”.
La decisión que “hemos adoptado de acuerdo con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana es que no vamos a actuar si no tenemos el consenso de todas las administraciones públicas de la isla, como hemos hecho desde el inicio”, ha insistido.
El portavoz de la Plataforma de Afectados por la Carretera de la Costa, Elías Navarro, ha mostrado su satisfacción con respecto a la decisión de no acometer los trabajos del segundo tramo, y ha destacado que ésta es “la mejor opción, y también la más humana”.
Para Navarro es de especial importancia que no se ejecuten esta carretera por vía de emergencia, ya que “quita esa nube de preocupación de la mente de nuestros vecinos”, y ha agradecido a la Consejería regional “el trabajo realizado este último año”, así como el apoyo “de todas las personas que han estado a nuestro lado y nos han dado voz”.
El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, ha descrito el tramo construido de la carretera de la costa, que atraviesa las coladas del volcán de norte a sur, señalando que “es una vía amplia, segura y cómoda para asumir el tráfico rodado a una velocidad razonable, y que estará ultimada entre finales de mayo y principios de junio”.
Anselmo Pestana ha dejado la puerta abierta a continuar con el segundo tramo de la carretera si se alcanza el acuerdo entre las administraciones locales, aunque ha dudado si “el consenso que no se ha podido lograr hasta ahora será posible en el mes y medio que queda de ejecución de obra; no creo en los milagros”.
El tramo 1 de la carretera de la costa es una vía convencional de 3,9 kilómetros de longitud y una velocidad en proyecto de 70 kilómetros por hora, con una sola calzada y un carril por sentido, cuyo trazado discurre en su mayor parte sobre coladas de lava, para lo que se ha debido utilizar un pavimento especial resistente a las temperaturas. EFE
