Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El consejero canario de Política Territorial, Manuel Miranda, no ha adelantado las modificaciones que se van a acometer en la Ley del Suelo para “corregir” sus “debilidades”, porque su departamento está “en proceso de escucha” para recoger aportaciones de las administraciones y colegios profesionales, con intención de buscar consenso social y también con todos los grupos políticos.
Miranda, que ha respondido en comisión parlamentaria sobre sus planes al respecto al diputado del PSOE Jorge Rodríguez sobre sus planes, ha dicho que la debilidad principal de la Ley del Suelo, aprobada en 2017, es que muchas administraciones locales, a las que la norma les da autonomía para desarrollar su planeamiento, no tienen capacidad ni recursos para desarrollarlo, dada su complejidad.
Según Miranda, la reforma de esta ley promovida por Coalición Canaria cinco años después de aprobada “no es una censura” a la misma, como afirmó Jorge Rodríguez, porque la normativa tiene “sus bondades”, como la forma descentralizada de abordar el planeamiento.
“Pero en su intención de descentralizar, se descentralizó en ayuntamientos que no tenían capacidad para abordarlo dada su complejidad”, explicó.
Para cambiar la Ley del Suelo, “estamos en proceso de escucha” con todos los sectores implicados para buscar “eficacia, proporcionalidad, transparencia y seguridad jurídica”, agregó.
En general, “se pueden matizar y aclarar artículos que se interpretan de distintas manera, tiene redundancias hay dificultades en la interpretación del suelo rustico, se puede mejorar y no es malo darle una vuelta”.
Manuel Miranda dijo que tiene “la mano tendida para todos” y Jorge Rodríguez le contestó que su grupo también tiene “la mano tendida” para mejorarla, aunque le recomendó que “no escuche mucho al PP”.
