La directora de la Fundación Mapfre en Canarias, Esther Martel (c); la presidenta de la Asociación Star-Up Corazón Solidario, Sonja Arup (i); el juez Tomás Luis Martín Rodríguez (i), al cargo del primer juzgado de España especializado en esta materia, presentaron este viernes un taller de sensibilización y prevención de la violencia contra los menores. EFE/Ángel Medina G.

La Fundación Mapfre Canarias ayuda a alumnos de Primaria a detectar la violencia infantil

Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La Fundación Mapfre Canarias promueve el taller “Te damos la clave”, una iniciativa educativa que ofrecerá al alumnado de 1º y 2º de Educación Primaria de los centros educativos de las 8 islas información, formación y herramientas para detectar la violencia contra la infancia.

Se trata de una actividad gratuita para la sensibilización, prevención, detección y adquisición de conocimientos sobre los mecanismos de actuación frente a todo tipo de violencia contra la infancia y la adolescencia, que se ofrecerá en un taller educativo creado junto a la Asociación STAR-UP Corazón solidario y el Juzgado de violencia contra la infancia y la adolescencia del Partido Judicial de Las Palmas de Gran Canaria.

La directora de la Fundación Mapfre Canarias, Esther Martel, ha explicado que el taller ‘Te damos la Clave’ es “un paso más” en el compromiso con la protección de los menores y ha precisado que empezará a impartirse a partir de enero del próximo año.

La Ley Orgánica 8/2021, de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia “garantiza los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes, y su integridad física, psíquica, psicológica y moral frente a cualquier forma de violencia” y, para ello, es necesario crear “figuras fundamentales” en espacios “clave”, como el coordinador de bienestar en el ámbito educativo y el delegado de protección en el ámbito del deporte y del ocio.

Como ha destacado la directora de la Fundación Mapfre Canarias, es “necesario” crear “entornos seguros”, en lo que se centra este taller, y que así “los menores sepan detectar situaciones de violencia y cómo reaccionar ante ella”.

El taller cuenta con dos personajes, Clara y Asun, que visitarán los colegios para enseñar a los menores “cómo decir que no” cuando están en una situación “incómoda” y a saber diferenciar entre “secretos buenos, como un regalo sorpresa, y secretos malos, que hacen que los niños no quieran jugar o reír, e incluso que se sientan culpables”.

También ha puesto en valor la importancia de “identificar a quién se lo pueden contar”, porque solo así “podemos evitar que ocurra”.

Asun y Clara trabajan con “una metodología cooperativa y el juego”, con los que trabajan las “zonas sensibles y privadas” y que cada una se llame por su nombre.

Los colegios interesados en este taller gratuito, en horario lectivo y en formato presencial, pueden hacer la solicitud en la web de la Fundación Mapfre Canarias o por teléfono.

El magistrado titular del Juzgado de Instrucción Número 3 y de Violencia contra la Infancia de Las Palmas de Gran Canaria, Tomás Luis Martín, ha explicado que en el marco normativo, España “está en el mejor parangón” y ha asegurado que en la práctica “las normas están consiguiendo una actividad proactiva en varios sectores profesionales”, que es algo “muy importante”.

Ha valorado el taller como una manera de que los menores “puedan dotarse de las herramientas para detectar que están sufriendo algún tipo de violencia”.

El magistrado considera “crucial empoderar a los niños y adolescentes a través del conocimiento y herramientas adaptadas a su edad en un formato accesible que pueden interiorizar”.

En 2022 se han registrado 420 asuntos relacionados con la violencia infantil, por los que 406 menores han pasado por el juzgado, ha detallado Martín, que valora esta cifra como “demasiado alta” para lo que tenían previsto, aunque es “terreno nuevo donde la ley está produciendo un efecto, no por mayor número de hechos delictivos, sino porque está ayudando a que esa cifra oculta ahora se detecte y se comunique” y así “poder intervenir”.

“Estamos avanzando”, ha asegurado, y “estamos en el buen camino, pero queda mucho por recorrer”, principalmente en prevención.

La presidenta de la Asociación STAR-UP Corazón Solidario y responsable del desarrollo del programa CLAVE-A, Sonja Arup, ha relatado que ella, víctima de violencia cuando era niña, tardó “casi 20 años en contarlo” porque, a su juicio, “falta información y formación”, lo que ha llevado a la creación de este taller.

Arup ha explicado que el taller nace de la necesidad de que el menor o adolescente pueda tener una “clave” o una “señal” para avisar de que está siendo víctima de abuso, con el gesto de la V al revés, formando “la A de ayuda, auxilio”.

Existen “campañas para los adultos”, pero no para los niños y niñas y es muy importante que sepan “identificar lo que están viviendo y cómo comunicarlo, sin miedo a contarlo” porque ella, como víctima, sabe que “es muy difícil” y que “la gran mayoría de las víctimas no denuncia”.

El trabajo de CLAVE-A también incluye cursos para adultos que forman parte del ámbito de los menores y adolescentes. EFE