La Orquesta Sinfónica de Kiev, bajo la batuta de su director, Luigi Gaggero, clausurará el 39 Festival de Música de Canarias con la obra de Liatoschinski, "La paz vence a la guerra", un deseo que todos sus músicos anhelan tras casi un año de la invasión de Ucrania por Rusia. En la imagen, el director durante la rueda de prensa que ofreció este miércoles para presentar el concierto. EFE/ Ángel Medina G.

La Sinfónica de Kiev cerrará el Festival de Música de Canarias

Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La Orquesta Sinfónica de Kiev, bajo la batuta de su director, Luigi Gaggero, clausurará el 39 Festival de Música de Canarias con la obra de Liatoschinski, “La paz vence a la guerra”, un deseo que todos sus músicos anhelan tras casi un año de la invasión de Ucrania por Rusia.

En una rueda de prensa que ha dado Gaggero en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria, donde ofrecerá este jueves el primero de los tres conciertos con los que concluye el festival, el director ha explicado el programa que interpretarán y ha confiado en que se sienta la “humanidad con la que toca la orquesta” y que la “intensidad de esta tragedia ha reforzado”.

“Sentir la humanidad de la orquesta es más importante que el repertorio” de los tres músicos célebres ucranianos que el público tendrá la oportunidad de escuchar, según el titular la orquesta, que también ofrecerá un concierto en el Auditorio de Fuerteventura el viernes y en el de Tenerife el sábado.

La primera obra del programa es la Sinfonía número 1 de Masksyme Berezovsky, alumno del padre Martini, que fue a su vez maestro de Mozart, es una pieza de “gran frescura, como el primer amor, diferente y que nunca se olvida”, según Gaggero.

A continuación, ha indicado que interpretarán el Concierto para arpa y orquesta de Reinhold Glière, compuesto en 1938, y en el que intervendrá Catrin Mair Williams, miembro de la Filarmónica de Gran Canaria.

Y para cerrar el programa, ha señalado que han elegido la obra original de Boris Liatoshinski, pero con el primer final que escribió el autor sobre la paz, que tuvo que cambiar por deseos de Stalin por una marcha militar y que el músico no volvió a escuchar, ha apuntado Gaggero, quien ha señalado que en la gira iniciada desde que comenzó la guerra la han interpretado una veintena de veces.

El titular de la Sinfónica de Kiev desde 2018 ha comentado que aunque la tragedia de los músicos está presente, pues cada día y hora reciben noticias de sus familias sobre los bombardeos que han sufrido o que han tenido que dejar sus casas, tocar con ellos “es fácil y difícil al mismo tiempo”, ya que, pese a su situación, “sienten más que nunca la necesidad de ser artistas y una energía con la que hacen mejor música”.

Así mismo, ha señalado que aunque han tenido que fijar su residencia en Alemania, desde donde desarrollan sus giras, recibe muchos mensajes de Ucrania, uno de ellos un anónimo escrito desde las trincheras, donde la persona que lo escribió, que desconoce si sigue viva, le decía tras ver un vídeo de la orquesta: “Esa es la razón por la que estoy aquí”.

Gaggero ha manifestado que desde que dio su primer concierto hace diez años en Kiev quedó sorprendido por la calidad del público y la expectación que producía la música en los ucranianos y comprendió la misión del músico de contactar con la vida y la muerte, “con lo importante”. “Esta experiencia trágica de la guerra me ha permitido entender la importancia de la música clásica y su necesidad real”, ha dicho.

Además, ha considerado que los músicos del este entienden y sienten la música de otra manera; los occidentales se esconden en la máscara de la profesionalidad, pero ellos tocan con “gran intensidad en cada nota”, algo que le fascina y que ha asegurado que es mayor aún debido a la guerra, ha destacado Gaggero.

El director también ha desvelado que nunca olvidará el primer concierto de la Sinfónica de Kiev tras la invasión, en Varsovia (Polonia), por la “humanidad” que desprendía.

El responsable del Festival, Jorge Perdigón, ha explicado que desde abril de 2022, cuando se conoció la gira “extraordinaria” que había emprendido la orquesta, se decidió invitarla a la clausura para contribuir a la continuidad de la vida musical ucraniana en unos momentos especialmente difíciles.

El concierto ha sido patrocinado por la Fundación Disa, cuya directora en Canarias, Sara Matero, ha subrayado que frente a la “barbarie de la guerra” es preciso visibilizar la necesidad de la paz con “una herramienta tan poderosa como es la música” y ha deseado una larga vida al festival, que, según su director, concluye con una afluencia de público superior a lo previsto y mejor que los años previos a la covid.

En las próximas semanas ya dispondrá de la cifra de asistentes, que ha augurado que serán “muy positivas”. EFE