El actor Pedro Mari Sánchez durante una actuación en la obra "Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó". EFE/productora Focus/David Ruano

Pedro Mari Sánchez: El teatro crea una temperatura emocional única entre actor y público

Torrelavega (EFE).- El veterano actor, músico y escritor Pedro Mari Sánchez asegura que cada actuación teatral es “un prodigio de lo imprevisto”, porque genera “una temperatura emocional única y diferente” y un “carne con carne” con el público “imposible de sustituir”.

No obstante, reconoce que el teatro vive en la actualidad “en un extraño lugar de equilibrio en la cuerda floja” por la competencia de la televisión y las plataformas de ‘streaming’, un lugar del que todavía no ha sido desalojado porque cada función sigue siendo un momento único, subraya Sánchez (Ciudad Real, 1954).

Dando vida al guionista Ben Hecht y junto Gonzalo de Castro, que interpreta al productor cinematográfico David O. Selznick, Pedro Mari Sánchez es el encargado de cerrar con “Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó” el Festival de Invierno de Torrelavega.

Parodia de un clásico del cine

En una entrevista telefónica con EFE, asegura que cerrar esta edición del festival, en su primera visita a la ciudad, “es un lujo y un honor”, y promete al espectador que verá una historia divertida, apasionante, llena de teatro y de cine.

A su juicio, la obra es “como abrir una ventana en clave de comedia” al momento en que se filmó ‘Lo que el viento se llevó’, una parodia del desastroso rodaje de este clásico del cine.

La función nace de las memorias del guionista Ben Hetch y todo lo que se cuenta son hechos reales para dar a conocer las dificultades que tuvo la producción de esta mítica película de los años 30, y también ver las distintas maneras de entender el cine y el mundo de los dos personajes principales.

Pedro Mari Sánchez asegura que se trata “de una historia llena de locura”, ya que el productor, David O. Selznick, encerró al guionista y al director Victor Fleming durante una semana para reescribir el guión de la película, durante la que sólo comían plátanos, cacahuetes y café.

Una mirada al viejo Hollywood

Para el actor, la obra es una mirada a los cineastas que crearon el mundo de Hollywood y el cine que hoy conocemos, y la principal moraleja es que personas con ideas opuestas pueden dar lugar a obras maestras.

“Es como la vida misma, porque la vida es mezclarse no estar apartados los que piensan de una manera de los que piensa de otra”, asegura.

Por eso califica de “un disparate” que la plataforma HBO Max haya retirado ‘Lo que el viento se llevó’ de su catálogo en Estados Unidos por, según justificó, ofrecer una visión idealizada de la esclavitud y perpetuar estereotipos racistas.

“Yo no comparto la alabanza del modelo esclavista que refleja la película, pero el arte está para que cada espectador decida por sí mismo. Lo políticamente correcto no puede estar imponiendo una línea de pensamiento que impida la libertad de creación”, afirma el actor.

El peligro de la ‘autocensura’

Sánchez enfatiza que la libertad creativa en el arte es fundamental y considera “muy peligroso” que se extiende la censura o la autocensura. “Si se quita el punto de vista crítico estamos impidiendo el avance de la sociedad, ya que no se puede restringir el pensamiento y la palabra”, subraya.

Tras participar en más de un centenar de películas, series y funciones teatrales y publicar libros como “La palabra mágica. Un método para adquirir elocuencia y aprender a contar y a contarte”, Pedro Mari Sánchez reconoce que le gusta “iniciar nuevas aventuras” porque a su edad “eso es todo un privilegio”.

Mientras gira con “Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó” ya prepara otros proyectos, entre ellos su participación como actor y cantante en una nueva versión de la ópera “Don Pasquale”, de Gaetano Donizetti, que se estrenará en Bilbao a finales de año.

Autor: Javier G. Paradelo