S001. Santander (Cantabria) 30/03/2024.- Las redes 5G han supuesto grandes avances respecto a las comunicaciones móviles previas, pero su estructura más desagregada también abre "más puertas" a los ciberataques, que un proyecto europeo en el que participa la Universidad de Cantabria trata de evitar. En la imagen, el catedrático de la UC, Ramón Agüero. EFE/Pedro Puente Hoyos

La red 5G busca mecanismos de defensa

Santander (EFE).- Las redes 5G han supuesto grandes avances respecto a las comunicaciones móviles previas, por ejemplo en prestaciones, capacidad o servicios, pero su estructura más desagregada también abre “más puertas” a los ciberataques.

Un proyecto europeo en el que participa la Universidad de Cantabria (UC) busca dar luz a estos peligros y proporcionar mecanismos para detenerlos o, en caso de que se produzcan, saber cómo actuar ante ellos.

El catedrático Ramón Agüero, que lidera el grupo de trabajo cántabro, explica que las redes asociadas a las nuevas generaciones de comunicaciones móviles han pasado de equipos “muy monolíticos”, proporcionados por los grandes vendedores de telecomunicaciones de “toda la vida”, a una estructura “mucho más desagregada”.

“Eso hace que la red sea más escalable y que se puedan establecer elementos de coordinación, pero, por otra parte, desde un punto de vista de la seguridad, hace que la red tenga más puertas donde se puede atacar”, advierte.

Bajo el título ‘5G Trusted And seCure network servICes’ (5G-TACTIC), este proyecto europeo se centra en establecer mecanismos, herramientas y formación para garantizar una seguridad adecuada en las redes 5G ante los ciberataques, que son un problema con el “que hay que tener cada vez más cuidado”.

No hay redes cien por cien seguras


Los peligros a los que se enfrentan estas redes son múltiples, apunta Agüero, porque no dejan de ser elementos informáticos y, como tales, pueden ser atacados.

Frente a ello, el Programa Digital de Infraestructura, al que pertenece ‘5G-TACTIC’, tratará de establecer mecanismos y de buscar el desarrollo de metodologías, de herramientas, e incluso de aspectos de entrenamiento o de formación.

Y el objetivo es “poder securizar esa red desagregada mucho más complicada para garantizar un uso adecuado y seguro de la misma”.

Sin embargo, señala Agüero, “no hay una red que sea cien por cien segura”.

S001. Santander (Cantabria) 30/03/2024.- Las redes 5G han supuesto grandes avances respecto a las comunicaciones móviles previas, pero su estructura más desagregada también abre “más puertas” a los ciberataques, que un proyecto europeo en el que participa la Universidad de Cantabria trata de evitar. En la imagen, el catedrático de la UC, Ramón Agüero, durante una entrevista con Efe. EFE/Pedro Puente Hoyos

“No va a estar cien por cien segura en ningún caso o va a ser muy difícil llegar a tener una seguridad completa. Lo que se tratará es de establecer niveles de protección que garanticen que en un porcentaje muy grande de los casos no se produzcan ataques”, apunta.

Se espera además que, conforme vaya evolucionando las comunicaciones móviles, al tender a desagregarse, sean “más difíciles de proteger”, por lo que proyectos como este cobran más importancia si cabe.

Las futuras redes 6G “van a tener claramente el mismo problema”, añade.

Principales beneficiados


Esta parte desagregada de la red sobre la que trabaja el proyecto no es la que emplea el usuario final, aclara Agüero.

“No es la que va desde la estación base a nuestro teléfono móvil, sino la que está más allá de la estación base y, en esa parte, todavía se están dando pasos para empezar a implantarse”.

Entre las instituciones que pueden beneficiarse de este conocimiento en ciberseguridad, considera el catedrático, están las autoridades nacionales.

Y ello porque tendrán una mayor información sobre los requisitos que se necesitan para asegurar la red y para elaborar la normativa que regule la utilización de estas redes.

También se aprovecharán de sus avances los operadores de comunicaciones móviles y otros nuevos actores que irán apareciendo para ofrecer estos servicios, y, por consiguiente, los propios usuarios.

“Porque al final los ataques nos van a perjudicar a nosotros”, apunta.

El proyecto está liderado por el Institute of Accelerating System and Applications.

Participan autoridades nacionales de regulación y pequeñas y medianas empresas innovadoras en tecnología europea que desarrollan soluciones 5G abiertas y servicios de seguridad, proveedores de infraestructura y operadores de redes móviles.