El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, en rueda de prensa. Imagen de archivo EFE/Ángeles Visdómine

La Policía continúa la búsqueda en el vertedero de Toledo

Toledo (EFE).- La Policía Nacional continúa en el vertedero de Toledo rastreando más restos humanos, tras la aparición este miércoles de los primeros en la zona donde se buscaba al niño de 11 años Ángel, con el fin de comprobar la identidad y, sobre todo, las causas de la muerte.

Así lo ha explicado el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, después de que este miércoles se encontraran restos humanos en la zona acotada del vertedero Ecoparque de Toledo en la que se buscaba a Ángel, en concreto, un pie que se llevó al Instituto de Medicina Legal de Toledo para practicar las correspondientes pruebas de identificación.

“No puedo trasladar ninguna confirmación de que los restos corresponden al segundo menor desaparecido, y la Policía Nacional continúa buscando restos e investigando todos y cada uno de los detalles relacionados con la desaparición de los dos menores”, ha afirmado el delegado del Gobierno.

Pese no poder ofrecer todavía ninguna confirmación oficial, ha añadido que se han encontrado “varios restos de un cuerpo” y que “evidentemente en ese mismo vertedero se estaba buscando al segundo menor desaparecido en Madrid”.

La Policía no tiene conclusiones, pero sí indicios y pruebas

Tampoco se han trasladado todavía las posibles conclusiones porque la Policía “no las tiene, existen indicios, pruebas”, ha explicado Tierraseca.

Además, ha agregado que “el estado del primer cadáver y de los restos que se acaban de encontrar tampoco son concluyentes y dificultan bastante la labor investigadora”, pero ha recordado que se hizo público el resultado de la autopsia de Fernando en la cual “no se observaban signos violentos”.

“Hasta que no se tengan pruebas concluyentes y finalicen las investigaciones se barajan todos los escenarios posibles”, ha asegurado el delegado del Gobierno, quien ha recordado que el caso está bajo secreto de sumario y además se trata de dos menores de edad.

Ha explicado que la coordinación de las labores de búsqueda se lleva desde la UFAM central (Unidad de Familia y Menor) y participan efectivos de la Comisaría Provincial de Toledo y de la Jefatura Superior de la Policía Nacional de Madrid.

La Policía trabaja con “todos los medios disponibles”

Este jueves, ya las labores de rastreo e investigación se centran en la parte del Ecoparque en la cual se localizaron los restos humanos, ha apuntado Tierraseca, quien ha añadido que la Policía Nacional trabaja con “todos los medios disponibles” y con “los medios tecnológicamente más avanzados”.

En la búsqueda del pequeño participan efectivos de la Policía Judicial, guías caninos, el Grupo Operativo de Intervención Técnica (GOIT) y la Policía Científica con retroexcavadoras y maquinaria auxiliar.

Un mes sin Ángel, el niño de 11 años al que buscan en el vertedero de Toledo
Vista del vertedero de Toledo donde la Policía busca al niño de 11 años que desapareció en Madrid el 10 de diciembre. EFE/Ismael Herrero

En el vertedero de Toledo se recogen al mes 22.000 toneladas de residuos de toda la provincia y hasta ahora se ha rastreado el 30 %, más de 9.000 toneladas de residuos.

El delegado del Gobierno ha pedido que se deje “a la Policía Nacional trabajar y al juez dirigir las investigaciones y, una vez que existan pruebas concluyentes, se darán a conocer “, ya que aún no han finalizado las investigaciones.

Las familias de los chicos piden la declaración de testigos protegidos

Las familias de Ángel y Fernando han preparado un escrito dirigido al juez de Toledo que instruye el caso para solicitar la declaración de varios testigos en calidad de protegidos cuyos testimonios podrían ayudar a resolver un posible crimen de los menores en la capital castellano-manchega.

Así lo ha confirmado este jueves uno de los portavoces de las familias y presidente de la Sociedad Gitana Española, Sinaí Giménez, junto a la vivienda de los padres de Ángel en el distrito madrileño de Villa de Vallecas.

También ha exigido que “el Gobierno incorpore todos los medios humanos posibles” para acelerar las labores de rastreo en el Ecoparque de Toledo.

El padre de Ángel, el niño de 11 años que desapareció el 10 de diciembre en Madrid junto a su primo Fernando, durante la rueda de prensa celebrada en Madrid. EFE/Fernando Villar

La investigación por la desaparición de ambos primos y la ya confirmada muerte de Fernando, de 17 años, mantiene abiertas varias hipótesis.

La Policía baraja que los menores pudieran haber sufrido una muerte accidental al resguardarse del frío en un contenedor, ya que el cadáver de Fernando, al que se le practicó la correspondiente autopsia, no reveló signos de violencia y adelantó que la causa de su fuerte fue la asfixia no mecánica o manual.

Las familias insisten en que la desaparición no fue voluntaria

Sin embargo, Sinaí Giménez ha reiterado que “existen pruebas, vídeos y audios que apuntan hacia otro camino”, ha remarcado en referencia a las informaciones que supuestamente tienen en su poder varias personas que estarían dispuestas a declarar en la causa como testigos protegidos.

También ha reclamado que la investigación se centre en las inmediaciones del centro comercial de Toledo en el que, a través de las cámaras de seguridad, se tuvo pista de Ángel y Fernando horas después de su desaparición, el pasado día de 10 diciembre: “Como en otros casos, como el de Diana Quer, que analicen los móviles en un radio determinado”.

El presidente de Sociedad Gitana Española, respaldado por ambas familias, ha pedido al juez que “autorice” las diligencias solicitadas por el abogado que les representa, Marcos García-Montes, así como que se produzcan “detenciones” y “registros” en aras de “conocer la verdad” para que los familiares puedan “descansar”.

Los chicos desaparecieron el 10 de diciembre

La última vez que se les vio fue la tarde del 10 de diciembre, cuando dijeron al padre del mayor que iban a comprar unos bocadillos al Hiper Usera de la calle General Ricardos, pero nunca volvieron.

Su desaparición fue voluntaria puesto que las cámaras de seguridad les captaron en varias estaciones de Metro y autobuses en Madrid, hasta que esa misma noche llegaron a Toledo, donde se les grabó en las inmediaciones de un hotel y en un centro comercial.

Según las indagaciones de la Policía, Fernando acudió a la capital toledana junto a su primo pequeño a encontrarse con una chica con la que había tenido una relación sentimental. No era la primera vez.

Sin embargo, la pista de los primos se perdió hasta que cinco días después apareció el cuerpo de Fernando en el Ecoparque de Toledo sin signos de violencia.