Valladolid (EFE).- A final de marzo la espera para ser operado en la sanidad pública de Castilla y León se situó en 111 días, frente a los 123 de final del 2022 o los 139 del mismo periodo del año anterior, con 2.006 de los 36.213 pacientes que están pendientes de una intervención que llevan más de un año en listas de espera .
La Consejería de Sanidad ha publicado este viernes los datos de la listas de espera del primer trimestre del 2023, que recogen que la demora media estructural para ser intervenido quirúrgicamente en los catorce hospitales públicos de Castilla y León se situó a 31 de marzo de 2023 en 111 días, frente a los 139 del mismo periodo de 2022.
Diez de los catorce hospitales de la sanidad regional tienen demoras por debajo de los 100 días (ocho incluso por debajo de 70), datos que confirman la tendencia de descenso de los trimestres anteriores, dentro del objetivo institucional previsto de reducción de demoras en la actividad quirúrgica, según ha referido la Consejería en un comunicado.
La demora media, entre los 158 días de Salamanca y los 43 de Medina
En concreto, según los datos de la Consejería recogidos por Efe, la demora media oscila entre los 158 días del hospital de Salamanca y los 149 de Burgos, o los 138 del Bierzo (León), y los 43 de Medina del Campo, en Valladolid, o los 48 de Palencia y los 49 de Zamora.
Hace un año, la espera oscilaba entre los 204 del hospital de Burgos y los 203 de Salamanca y los 44 de Palencia y 49 de Medina del Campo, y a final del 2022, tras poner en marcha medidas contra la lista de espera en el segundo semestre del pasado año, la demora media se situó en 166 días en el hospital de Salamanca, con 163 en el de Burgos y 156 en el del Bierzo, con los 49 de Palencia y Medina del Campo, en el otro extremo.
2.246 pacientes en espera más en este trimestre
El número de pacientes en espera estructural -cuya espera es atribuible a la organización- se situó en marzo en 36.213, un 15 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando fueron 42.574, aunque suponen 2.246 más que los 33.967 que había a 31 de diciembre del 2022.
Por especialidades, las que tienen menor demora media estructural en el periodo considerado son Cirugía Torácica (27 días), Dermatología (30 días) y Cirugía Cardiaca (36 días), mientras que las que acumulan más esperas son Traumatología (158 días), Cirugía Plástica (142 días) y Neurocirugía (139 días de demora media), aunque todas mejoran respecto a marzo del año pasado.
En cuanto a la comparativa con los datos del 31 de diciembre del 2022, la mayor demora era en traumatología, con 171 días, seguida de neurociguría con 157, cirugía plástica con 145 y cirugía general y de digestivo con 134.
En el otro extremo, a final de año las menores demoras estaban en dermatología, con 35 días, con 49 en cirugía cardiaca.
Las demoras de más de un año suben ligeramente
En cuanto a las demoras, hay 2.006 pacientes que llevan más de un años pendientes de ser operados, cuando a final del 2022 eran 1.935, aunque el dato es mejor que los 3.512 de hace un año.
De los 36.213 pacientes pendientes de ser operados, llevan entre medio y un año 5.464, frente a los 6.510 de final del 2022, y los 7.911 del mismo periodo del año anterior.
Por diagnósticos, los cuatro procesos con mayor número de pacientes en espera de intervención a 31 de marzo de 2023 fueron: cataratas (5.099 pacientes), hernia inguinal (2.173), artrosis de rodilla (2.007) y deformaciones adquiridas de los dedos (1.335 pacientes).
En cuanto al criterio de prioridad para ser intervenido -uno de los parámetros más importante a la hora de analizar las listas de espera-, el 100 % de los 1.009 pacientes registrados en el nivel 1, es decir, con indicación de ser operados antes de 30 días dada su patología, estaba en marzo dentro del rango y con una demora media de 9 días.
En prioridad 2 había en la fecha analizada un total de 6.347 pacientes, con una demora media estructural de 114 días, cinco días menos que en diciembre pasado. En prioridad 3 se han registrado 28.857 pacientes en lista de espera, con demora media también de 114 días, 14 días inferior a la del cierre de 2022.
Consultas externas: 7 días menos de espera pero más pacientes -213.357-
En cuanto a demoras para una consulta externa hospitalaria en los centros de la sanidad pública de Castilla y León, el balance a marzo de 2023 indica que la espera media estructural se situó en 88 días, siete días menos que en el cierre del 2022, con diez hospitales por debajo de esa cifra.
Las mayores demoras las tienen a final de marzo el hospital de Soria, con 167 días, el del Bierzo, con 159 días, con 151 el de Salamanca, y 90 en el de Burgos, con los 37 de Medina del Campo y 53 del Clínico de Valladolid y el Santiago Apóstol, en Miranda de Ebro (Burgos), en el otro extremo.
El número de pacientes en espera estructural para una primera consulta externa asciende en esa fecha a 213.357, un 0,7 % más que en el último trimestre de 2022.
Por hospitales, las esperas para esa primera consulta externa son de 35.269 pacientes en Burgos, con 30.131 en el Río Hortega de Valladolid, 24.562 en el del Bierzo (León), 24.248 en el de León, 17.573 en el Clínico de Valladolid y 15.909 en el de Salamanca, según los datos recogidos por EFE.
El menor número de pacientes lo tiene el hospital de Medina, con 3.368, seguido del Santiago Apóstol, con 3.443.
La Junta anuncia actividad extra ante esas demoras en consultas
Para disminuir estas listas de espera se programará, en aquellos centros o especialidades que lo precisen, actividad extraordinaria.
En cuanto a la demora media estructural de las pruebas diagnósticas que se analizan cada trimestre, los datos a marzo de este año han sido los siguientes: 60 días para un TAC (2 días menos que en el trimestre anterior), 72 días para una resonancia magnética (12 días menos), 87 días para una ecografía (mismo tiempo de espera) y 79 días para una mamografía.
Por lo que se refiere al número de pacientes en espera estructural, para un TAC suman 3.653 en el periodo considerado; 2.689 para una resonancia magnética; 11.426 para una ecografía; y 910 pendientes de una mamografía.
La Gerencia Regional de Salud ya ha comenzado a implantar el gestor de peticiones radiológicas, una herramienta que permitirá disponer de registros con mayor validez y fiabilidad, ya que actualmente entre los pacientes pendientes de cita se contabilizan pruebas correspondientes a controles y/o revisiones.EFE
