Cristina García Casado
Salamanca oct (EFE).- ¿De dónde sale el dinero? ¿Qué es un sueldo? ¿Por qué es importante ahorrar? La educación financiera tiene fama de árida y parece cosa de adultos, dos ideas que ha querido contrarrestar la catedrática de Economía Esther del Brío con su divulgación a través de la literatura infantil.
“En la crisis de 2008 vi que hacía falta material para los niños, cuando comencé a buscarlo para explicarle la situación a mis hijos. Es importante que conozcan desde pequeños algo tan sencillo como el valor, el precio, de dónde sale el dinero”, ha indicado la profesora a EFE con motivo de la celebración este lunes del Día de la Educación Financiera.
Lo que comenzó con unas hojas escritas para sus hijos ha terminado en un libro de cuentos ilustrado, “El bosque de la economía”, que autopublicó con la editorial Círculo Rojo y cumple su tercera edición convertido en material escolar: ya se han repartido 1.500 ejemplares en colegios de la provincia de Salamanca.
“Es un libro de educación financiera y también material de apoyo a la lectoescritura, porque cada concepto corresponde a una letra del abecedario. Desde Andrea la abeja ahorradora hasta la zorrita Zoé que visita el zoco”, ha descrito Del Brío, catedrática de Economía Financiera en la Universidad de Salamanca (USAL).
1.500 ejemplares
En este inicio de curso se han distribuido 1.500 ejemplares de “El bosque de la economía” para el segundo ciclo de infantil y el primer ciclo de primaria, en el marco de un convenio sobre educación financiera de la USAL, la Junta de Castilla y León y Caja Rural de Salamanca, encargada de la financiación del proyecto. Un libro para hablar del dinero con los hijos
Del Brío defiende que un libro como este puede generar una conversación que “no se da normalmente” entre padres y niños pequeños: hablar de por qué los adultos tienen que irse a trabajar, de lo que es el sueldo, “de que el dinero no sale mágicamente del cajero, sino que ellos lo han tenido que ganar antes”.
Aventuras animales
A través de las aventuras de animales, un clásico de la literatura infantil, la catedrática acerca a los más pequeños conceptos como “el banco”, qué es “caro y barato” y qué supone una “crisis”.
“En el estudio piloto que hicimos, descubrimos cosas sorprendentes como que algunos niños con 12 años no sabían cómo llegaba el dinero al cajero de dónde veían que sus padres lo sacaban”, ha asegurado la autora.
De ese estudio extrajeron otra conclusión: en un colegio rural donde el nivel de renta era baja, los niños “ya conocían el valor del dinero”, porque “sus familias tienen problemas económicos y les han tenido que explicar que no les compran algo porque no tienen suficiente para pagarlo”.
“Algunos jóvenes se enteran de lo que vale el dinero cuando se han ido de casa, por eso es importante desde pequeños que aprendan a manejar estos conceptos básicos para su vida”, ha concluido Del Brío, quien para afinar su libro contó con la ayuda de sus dos hijos, su primera motivación para escribirlo. EFE