Última jornada del juicio contra Pedro Muñoz por violencia de género contra su mujer en la Audiencia Provincial de León. EFE/ J. Casares

La fiscalía mantiene los dieciocho años de prisión para el acusado de precipitar a su mujer por el balcón

León (EFE).- La fiscalía ha mantenido su petición de pena de 18 años y 9 meses de cárcel para el exconcejal del Ayuntamiento de Ponferrada (León) Pedro Muñoz, de 67 años, en el juicio que se sigue contra él por supuestamente haber precipitado a su mujer, la abogada Raquel Díaz, desde una terraza en una finca de la localidad de Toreno (León), en mayo de 2020. La mujer, de 47 años, sufrió lesiones graves que la han dejado tetrapléjica.


Tras seis sesiones, el caso ha quedado visto para sentencia este jueves con la presentación de las conclusiones finales por las distintas partes, en las que la fiscalía mantiene la condena ya solicitada y las acusaciones particulares elevan la pena a 22 y 23 años, respectivamente.


La defensa no ve pruebas objetivas de culpabilidad


Por su parte, la defensa ha solicitado la libre absolución del acusado al entender que no se ha presentado durante el juicio ni antes ni una sola prueba objetiva que demuestre su culpabilidad.


Además, ha remarcado que Raquel Díaz ha incurrido en innumerables contradicciones al igual que ha cambiado su declaración sobre lo sucedido en varias ocasiones.


La fiscal se ha mantenido en sus tesis y ha sostenido que el acusado fue autor de cinco delitos, el más grave el de lesiones agravadas ya que ha retirado el de tentativa de homicidio al aplica la atenuante de arrepentimiento, ya que llamó al 112 cuando se produjo el suceso y colocó a la víctima en posición de seguridad debido a que es enfermero de profesión.


Malos tratos continuados


Ha recalcado que Raquel Díaz fue víctima de malos tratos continuados por lo que reconoce también violencia psíquica, y acusa a Muñoz además de un delito de injurias y de amenazas por los insultos a los que era sometida.


Ha recordado que los médicos que la atendieron han declarado en el juicio que las lesiones que presentaba la víctima eran compatibles con una agresión.


Aunque Pedro Muñoz aseguró desde el principio que se trató de un accidente, las investigaciones policiales una vez que los médicos alertaron de una posible agresión desembocaron en su detención ante algunas evidencias que ponían en entredicho su versión de los hechos.


Al respecto, la fiscal ha insistido en que una facultativa de la UCI afirmó que tuvo la sensación desde el principio era que se trataba de un caso de un violencia machista, y ha precisado que las explicaciones que Muñoz dio para justificar las lesiones era confusas y contradictorias.


“Continuo horror”


En su declaración en la primera sesión del juicio, Raquel Díaz afirmó que durante los cuatro años que pasó junto a Muñoz vivió un “continuo horror” con agresiones físicas, vejaciones e insultos.


La mujer reiteró en el juicio que fue su exmarido quien la arrojó desde una ventana en su casa tras un discusión, mientras que el acusado ha insistido que se trató de una caída accidental y que la encontró en el suelo ensangrentada.


Muñoz ha hecho este jueves uso de su derecho a la última palabra y un extenso alegado de casi media hora ha reiterado que es inocente y que si su exmujer esta viva es gracias a él que la atendió cuando se le encontró en el suelo ensangrentada.


También ha afirmado que, muy al contrario de lo que se ha dicho en el juicio, era él que se sentía controlado por su mujer con la que vivió una relación “absolutamente tóxica”. EFE