El lugar donde una joven de Roales del Pan murió a causa del ataque de unos perros de pastoreo. EFE/ Mariam A. Montesinos

El juzgado ordena el sacrificio inmediato de los perros del ataque mortal en Zamora

.Zamora (EFE).- El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Zamora ha ordenado el “sacrificio inmediato” de los perros mastines y de carea que el pasado mes de octubre atacaron mortalmente en un camino de concentración a una joven de Roales del Pan, en el alfoz de la ciudad de Zamora.


El juzgado ha argumentado la no existencia de algún informe de expertos que descarte de forma absoluta que, en caso de volver a quedar en libertad, no puedan volver a cometer un hecho similar, “lo cual acredita la enorme peligrosidad de los mismos”, según el auto del que ha informado este viernes el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

Las banderas del ayuntamiento ondean a media asta por la muerte de la joven atacada el pasado 23 de octubre por cinco perros en Roales (Zamora). EFE/ Mariam A. Montesinos

Prisión provisional para el pastor


La resolución que ordena el sacrificio decreta además la prisión provisional, comunicada y sin fianza, del pastor de La Hiniesta al que pertenecían los canes que mataron a la joven Arancha Corcero, la tarde del pasado 23 de octubre, cuando daba un paseo.


Tras valorar el contenido del atestado, las declaraciones de los testigos, la declaración del propio acusado, la autopsia y otras diligencias practicadas desde la apertura de la actuación judicial, el juez ha entendido que los hechos revisten los caracteres de un delito de homicidio castigado con penas de más de dos años de prisión.

Evitar reiteración delictiva


Otro argumento esgrimido por el juez para el ingreso en prisión es el de evitar la “reiteración delictiva”, ya que el pastor tiene antecedentes administrativos por dejar en más ocasiones sueltos y sin control a “perros tan peligrosos”, por lo que “nada impide que vuelva a cometer hechos similares, pues sigue teniendo la misma profesión”, ha argumentado el juzgado.


Ha recordado además que los canes no tenían seguro ni elementos de control como bozales cuando atacaron a la joven a la que mataron en un camino público muy transitado, sin que existiera causa o provocación para ello y sin que el pastor estuviera presente o en los alrededores, a una distancia que permitiese controlar a los perros ante cualquier percance. EFE