La actriz Núria Espert posa para los medios de comunicación antes de presentar su regreso a los escenarios con la obra de Alejandro Palomas "La isla del aire", dirigida por Mario Gas, un espectáculo del Teatre Romea en la que la veterana actriz estará acompañada por Vicky Peña, Teresa Vallicrosa, Miranda Gas y Candela Serrat. EFE/Quique García

Núria Espert vuelve a escena atraída por “la oferta peligrosa” de Alejandro Palomas

Barcelona (EFE).- Núria Espert vuelve a los escenarios, de los que de hecho nunca ha bajado aunque a veces se haya tomado algunos meses de descanso entre montaje y montaje, con “La Isla del Aire”, una obra que la define porque, a sus 87 años, sigue teniendo la misma valentía de siempre y ha vuelto a elegir “la oferta más peligrosa”.

“Tenía ofertas menos peligrosas -ha reconocido este miércoles en el Teatro Romea de Barcelona, donde estrenará el próximo 25 de marzo-, pero me pareció que donde yo podía sacar algo era en este personaje complejo y en esta obra con tono de tragedia que, como es sabido, es el género superior en materia de sentimientos”.

“La Isla del Aire” es la adaptación teatral que el propio autor, Alejandro Palomas, ha hecho de su libro homónimo y que en este montaje dirige Mario Gas, con un elenco de lujo capitaneado por Núria Espert y formado por Vicky Peña, Teresa Vallicrosa, Miranda Gas y Candela Serrat.

En rueda de prensa en el Romea, Espert ha recordado que ella empezó en este mismo teatro y que en una de sus oficina hizo, siendo adolescente, una prueba para optar a un papel en una obra basada en un cuento infantil.

“Josep Maria de Sagarra me dijo, con mucho cariño, que tenía unos cojones como un toro. En aquella época yo era una adolescente a la que no le gustaba que le dijeran esas cosas, pero ahora sí me gusta y espero que ustedes piensen que sigo en mi línea”, ha comentado.

La valentía que Espert demostró en sus inicios han marcado toda su carrera porque, tal como ha confesado: “mi vida gira alrededor de esas dificultades que se viven en el teatro. Siempre he caminado hacia un teatro que no sé cuál es, pero que algunas noches vislumbro, y ese es el eje de mi vida”.

“Los espectáculos que eliges definen quién eres y los errores se quedan clavados con chinchetas”, ha afirmado la gran dama del teatro, que ha aceptado protagonizar “La Isla del Aire”, a pesar de que “con los autores clásicos siempre estás más protegida que con los contemporáneos”, porque e una obra que le ha permitido “acceder a un recuerdo de vida tan bien explicado y desarrollado que todas sentimos que estamos contando nuestra propia historia”.

“La Isla del Aire” narra las vivencias de una familia formada por una matriarca (Núria Espert), sus hijas (Vicky Peña y Teresa Vallicrosa) y sus nietas (Miranda Gas y Candela Serrat).

Cinco mujeres aisladas en su propio dolor que la abuela intenta sacar del ensimismamiento invitándolas a ir hasta la Isla del Aire -un islote con un faro situado frente a la costa de Menorca-, en un intento de liberar a sus hijas y exorcizar demonios.

Un mundo femenino en el que, si se sustituyeran los personajes femeninos por masculinos, “se convertiría en otra obra, como ocurre con ‘La casa de Bernarda Alba'”, según Espert.

“Es la historia de una saga que se acerca a la mirada de la dramaturgia del norte de Europa -ha aclarado la actriz- y, como en las tragedias griegas, hay momentos de humor de buena ley, para ayudar a soportar lo que tiene que venir”.

El director Mario Gas ha admitido que el texto es “un material difícil de manejar, porque tiene una complejidad que delata su origen literario”, por lo que ha optado por convertirlo en un “poema sinfónico-teatral”.

Enlazando con esta definición, Vicky Peña se ha animado ha describir el espectáculo como “música de cámara para cinco instrumentos”, porque “no es un teatro discursivo y aristotélico, sino que busca tocar las fibras del sentimiento y del pensamiento a través de las vibraciones del alma”.

“Espero que sepamos traspasar el espacio que hay entre el escenario y la platea y los espectadores se lleven a casa la luz y la esperanza que brilla al fondo de esta obra”, ha deseado Espert.