Barcelona.- La sequía persistente ha puesto contra las cuerdas al sector agrícola en Cataluña, que reclama que se ponga en marcha ya la maquinaria de las ayudas ante una situación que califican de “dramática”, sobre todo para las comarcas de Lleida, que no tienen agua para los cultivos de verano.
Las comarcas del Pla d’Urgell, la Noguera, Urgell, les Garrigues y el Segrià son algunas de las más afectadas por la actual situación de falta de precipitaciones, y si no llueve en los dos próximos meses, los agricultores advierten que ya no se podrán regar los frutales y los almendros.
El presidente de Joves Agricultors i Ramaders de Catalunya (AJEC), Joan Carles Massot, ha asegurado a EFE que “ya hace un mes que le pedimos a la Generalitat que prepara las medidas compensatorias porque si no llueve estamos perdidos”, por lo que ha urgido a convocar la mesa agraria. “Ya vamos tarde”, ha lamentado.
La Comunidad General de Regantes del Canal de Urgell (CGRCU) ya ha decidido solicitar a la Generalitat y al Gobierno la declaración de zona catastrófica por la “situación dramática, excepcional y persistente” de falta de agua, para hacer posible así el cobro de indemnizaciones de los regantes.
El presidente de la CGRCU, Amadeu Ros, ha alertado de la posibilidad de que se tenga incluso que cerrar el riego a finales de mayo si no llueve durante los próximos días. “No se ha visto una sequía tan importante desde hace 70 años y no tenemos agua para los cultivos de verano”, ha subrayado.
De momento, la comunidad de regantes rebajará el caudal del agua, de 27 a 23 metros cúbicos por segundo, para garantizar el riego de cultivos de trigo y cebada, que se segarán durante el mes de junio, mientras que ha instado además a no plantar cereales de verano por la falta de agua.
El Canal d’Urgell es la infraestructura de regadío que abastece más hectáreas de Cataluña, unas 70.000 situadas entre las comarcas del Pla d’Urgell, la Noguera, Urgell, les Garrigues y el Segrià, además de dar servicio a una población de unos 77.000 habitantes, a las industrias y a la ganadería de la zona.
Por su parte, Unió de Pagesos ha cifrado en 180 millones de euros las pérdidas de los agricultores de cereal de secano, el más afectado por la sequía, y ha exigido a la administración una ayuda de 100 euros por hectárea.
El sindicato agrario ha alertado que corre peligro la viabilidad económica de este sector y que, si los agricultores no pueden hacer frente a los gastos de la actual campaña, tendrán que dejar de cultivar.
“Si no se puede regar no se puede producir. Si no llueve pronto, los cultivos se quedarán muy mermados y en algunas partes no se podrá cosechar”, ha afirmado el coordinador nacional de Unió de Pagesos, Joan Caball.
La JARC ha pedido además que se revisen los sistemas de seguros, que no cubren las pérdidas provocadas por la falta de lluvia en la zona de regadío, y que se “agilice” la ejecución del plan de modernización del Canal d’Urgell porque aún no se ha iniciado ninguna de las obras previstas.
Las zonas agrícolas de Cataluña regadas con agua de la infraestructura del CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro) se encuentran en una situación muy diferente, pese a que se ha declarado la alerta en el canal de Pinyana, situado en la comarca del Segrià, en la frontera con Aragón.
“Allá se podrá acabar la campaña. Hay restricciones pero se está regando”, ha apuntado Massot.
El coordinador de las comarcas de montaña de Unió de Pagesos, Joan Guitart, ha alertado también, en declaraciones a EFE, de la situación en la que se encuentran las comarcas de montaña. “Si no llueve en 15 días el ganado que va a estos pastos no pondrá hacerlo”, ha indicado.
Muchos productores de leche se pueden ver abocados a sacrificar a los animales por no poder alimentarlos, ha alertado este sindicato.