Varios operarios de SEAT trabajan en la cadena de montaje.

La Cambra de Comerç rebaja cinco puntos el crecimiento del PIB para 2024, hasta el 1,8 %

Barcelona (EFE).- La Cambra de Comerç de Barcelona estima que la economía catalana crecerá un 1,8 % en 2024, cinco puntos porcentuales por debajo de lo previsto en julio, mientras que sitúa en el 2,3 % el aumento del PIB en este 2023, frente al 2,2 % anunciado hace tres meses.

Así lo concluye el nuevo informe de esta corporación de derecho público sobre la coyuntura económica y sus previsiones a futuro, elaborado a partir de diversas fuentes públicas, del que ha dado cuenta el jefe del gabinete de Estudios Económicos e Infraestructuras, Joan Ramon Rovira, y que ha sido el primero hecho público desde que Josep Santacreu asumiera la presidencia de la institución.

Rovira ha atribuido esta “ralentización” de la economía -que no “recesión”, ha insistido- a que los tipos de interés seguirán elevados durante “más tiempo de lo previsto”, lo que se suma a las peores perspectivas de los países de la zona euro, cuyo desempeño afecta de lleno a la economía catalana.

Con todo, ha remarcado que se estima que el PIB catalán crezca por encima del aumento medio de la zona euro, ayudada por la inversión en obra pública, empujada por los fondos europeos Next Generation para superar el bache de la covid-19, lo que contrasta con una inversión en vivienda a la baja.

Un aspecto que Rovira ha destacado es el “dinamismo” del empleo, con una creación neta de puestos de trabajo en el tercer trimestre superior al mismo periodo de 2019, si bien se prevé que se registren avances cada vez más “modestos”.

Ello, sumado al aumento de salarios y al aumento de la productividad -que puede estar relacionada con la reforma laboral, señala la Cambra-, debe ayudar a que el consumo “resista”, pese a que el sector que más puede sufrir es el del comercio.

Por contra, preocupa “el debilitamiento de la inversión productiva” -ya que se desacelera la inversión en bienes de equipamiento- y la previsión de que el sector exterior, pese a mantenerse en balance positivo y por encima de otras economías del entorno, se modere del 14 % de crecimiento en exportaciones de 2022 al 5,1 % previsto para 2023 y al 4,3 % augurado para 2024.

Malos augurios también en lo relativo a la inflación, puesto que “el significativo incremento de los costes laborales” hacen prever que esta no baje del 3 % en los próximos meses.

A modo de conclusión, Santacreu ha puesto en valor los “deberes” hechos por el tejido productivo catalán, que ha reducido su endeudamiento en los últimos años -pues no se aprecia un repunte de la morosidad empresarial- y ahora afrontará con mayor fortaleza las consecuencias del aumento de los costes de financiación.

Con todo, la institución señala que en este sentido “la problemática es muy diferente por sectores y dimensiones de empresa”.

Para hacer frente al “horizonte de cierto riesgo” que se avecina, Santacreu ha hecho un llamamiento a trabajar para aumentar la productividad y, a este respecto, ha aplaudido que las empresas catalanas estén manteniendo sus inversiones en tecnología e inversión y desarrollo.