Barcelona, (EFE).- El gasto extra que la Generalitat debe asumir por culpa de la pandemia de la covid-19 se ha recortado de enero a septiembre un 70 % en relación al mismo período de 2021, pero aún supone 840,4 millones en los nueve primeros meses de 2022.
Aunque la incidencia de la pandemia es cada vez menor, el gasto asociado a ella sigue teniendo una incidencia relevante sobre las finanzas de la Generalitat, según revela el último informe mensual de ejecución del presupuesto que elabora el departamento de Economía de la Generalitat, el correspondiente a septiembre.
De estos 840,4 millones de gastos extra acumulados hasta septiembre, un total de 527 millones corresponden a gasto directo sanitario y sociosanitario, de los cuales 126,4 millones son imputables a personal sanitario.
Asimismo, de enero a septiembre el gasto indirecto asociado a la covid-19 ascendió a 313,4 millones, de los que 166,7 millones corresponden a contratación de personal para el curso escolar y otros 94,28 millones a ayudas y subvenciones, entre otras partidas.
Al margen de los gastos, la Generalitat ha dejado de ingresar unos 54,3 millones hasta septiembre debido a la pandemia, en este caso por la pérdida de ingresos del transporte público de viajeros.
En cambio, en los nueve primeros meses de 2021 el gasto asociado a la covid ascendió a 2.826,2 millones, lo que supone más de tres veces más que en lo que va de año.
Es decir, de enero a septiembre de 2021 la pandemia costó a las finanzas de la Generalitat un total de 1.015,8 millones en términos de gasto directo sanitario y otros 1.810,5 millones por gasto indirecto.
No obstante, el impacto real para la Generalitat fue mucho mayor, ya que a esos 2.826,2 millones de gasto extra hay que sumar otros 987,1 millones de merma de ingresos.
Con todo, este año el Estado no ha habilitado, de momento, ningún fondo extraordinario para hacer frente a los gastos derivados de la pandemia, recuerda el departamento de la Generalitat.
El año 2020 fue el más costoso para la Generalitat, ya que la pandemia tuvo un impacto económico de 5.213,8 millones en total, equivalentes a un 2,4 % del PIB catalán.
De ese importe, un total de 3.601,8 millones correspondieron a gastos, 2.085,1 millones de tipo directo, es decir, sanitarios y sociosanitarios, y otros 1.516,7 millones de euros de tipo indirecto e inducido.
En 2021 las vacunas permitieron reducir sustancialmente la mortalidad provocada por la pandemia, pero pese a ese cambio clave el gasto fue mayor aún que en 2020, porque se mantuvo la presión hospitalaria y aumentaron las ayudas a los sectores económicos afectados.
Así, el gasto total provocado por la covid-19 sumó 3.909 millones, 2.027,2 millones de los cuales por gasto sanitario y sociosanitario y otros 1.881,7 millones por gasto inducido e indirecto, lo que incluía las ayudas a los sectores económicos más perjudicados por el coronavirus.
Con todo, el impacto económico de la pandemia en 2021 fue de 4.220,7 millones, equivalente al 1,8 % del PIB catalán, aunque inferior al de 2020 gracias a la recuperación de los ingresos.
Y es que la merma de ingresos provocada por la pandemia se limitó en 2021 a 311,8 millones, que se explicaron, principalmente, por la caída de los ingresos del transporte público (156,3 millones), y por el descenso de recaudación de impuestos como la tasa turística (43,6 millones).
