Fotografía cedida por el Consejo General de Arán de la Síndica del Arán, Maria Vergés, que ha exigido al presidente de la Generalitat que se aprueben presupuestos catalanes para 2023, ya que son "esenciales" para el futuro de este territorio, además de avanzar que mañana reclamará al Parlamento catalán que se garantice la vehicularidad del aranés en la escuela.

La Síndica del Aran exige presupuestos catalanes para 2023 y proteger el aranés

Barcelona (EFE).- La Síndica del Arán, Maria Vergés, ha exigido al presidente de la Generalitat que se aprueben presupuestos catalanes para 2023, ya que son “esenciales” para el futuro de este territorio, además de avanzar que mañana reclamará al Parlamento catalán que se garantice la vehicularidad del aranés en la escuela.

En una entrevista con EFE, Vergés ha analizado la situación del Valle de Arán y ha avanzado las principales cuestiones que mañana expondrá en su comparecencia en el Parlamento catalán, ante la Comisión de Asuntos Institucionales donde según la ley de régimen especial del Arán debe intervenir al menos una vez al año.

El objetivo principal de su comparecencia, ha explicado, será “hacer pedagogía y crear empatía hacia el autogobierno aranés”, que según Vergés “no se ha podido desplegar de manera efectiva en los últimos treinta años” y que la síndica cifra en apenas un 30 % de despliegue, principalmente en el ámbito sanitario.

“Se trata de compilar los agravios, que los hay y muchos; pero también las cosas que van avanzando, muy lentamente, extremadamente lentas, pero que van saliendo”, ha señalado.

Vergés considera que es necesario un “despliegue competencial, de financiación y también una lealtad y respeto institucional”, que ha lamentado que “va y viene” en función de los gobiernos en la Generalitat. “Hay cuestiones que no responden a mala fe o mala voluntad, pero sí a desidia, dejadez o desconocimiento de lo que suponen estos incumplimientos para el Arán”.

La síndica, que ha explicado que las relaciones con el actual Ejecutivo de ERC son “correctas”, ha relatado que hace pocos días envió al president Pere Aragonès una carta en la que le exponía que la aprobación de los presupuestos catalanes de 2023 eran “esenciales para Cataluña, pero también para el Arán”.

“Si no se aprueban, dejaremos de recibir cuatro millones de euros, que para cuestiones de inversión serían más que importantes”, ha dicho la dirigente, que ha recordado que el Arán “no se ha recuperado” de los recortes de 2012 y el margen para hacer políticas propias es “casi nulo”.

Y ha lamentado la “infrafinanciación” histórica hacia su territorio, con una variación de inversión de la Generalitat del -84 % en los últimos doce años, que sitúan al Arán “en la cola” de la inversión del Estado y de Cataluña en las comarcas de Lleida.

“Evidentemente el Estado debe cumplir, pero la Generalitat tampoco lo está haciendo”, ha dicho Vergés, que ha situado como prioridades de inversión la remodelación del Hospital de la Vall d’Aran y la construcción de un centro cultural, ya que el Arán es el único territorio pirenaico sin ese equipamiento.

Precisamente esta mañana el pleno extraordinario del Consejo General de Arán ha aprobado por unanimidad presentar una iniciativa legislativa en el Parlamento catalán para modificar la ley de uso de lenguas oficiales en la enseñanza no universitaria, en su disposición adicional referente al aranés, algo que mañana Vergés presentará ante los diputados catalanes en su comparecencia.

Si bien el Parlamento catalán, gracias a los votos de ERC, JxCat, PSC y comunes, modificó esa ley para proteger el modelo de escuela en catalán frente a la sentencia que obligaba a un 25% de horas lectivas en castellano, la síndica reclama que ahora se modifique también la disposición adicional única referente al aranés y “reconozca su vehicularidad en la escuela”, para evitar “garantizar su seguridad jurídica”.

“La Generalitat no ha cumplido con Arán en materia lingüística. Somos conscientes de que esa ley está envuelta en polémica y no es nuestra intención echar más leña al fuego, pero sí queremos tener una seguridad jurídica que ahora no tenemos”, ha afirmado.

Además, ha pedido “recursos, lealtad y respecto institucional” para proteger al aranés, cuya ley de política lingüística está “obsoleta, no se ha desplegado y no se ha dotado de financiación, con solo 100.000 euros frente a los 38 millones que recibe el catalán.