Vista este miércoles de los trabajos de construcción del tramo más largo del carril bici del paseo de la Castellana, que discurrirá entre plaza de Castilla y la calle Raimundo Fernández Villaverde. EFE/ Juan Carlos Hidalgo

El primer tramo del carril bici de la Castellana avanza a buen ritmo

Madrid, 17 ago (EFE).- Las obras del primer tramo del carril bici de la Castellana, que va desde plaza de Castilla hasta Raimundo Fernández Villaverde, transcurren a buen ritmo y cumpliendo los plazos previstos, por lo que en marzo de 2023 se pondrán en servicio los primeros 4 kilómetros de esta vía que acabará concluyendo en Atocha.

El delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y la presidenta del distrito de Tetuán, Blanca Pinedo, han visitado este miércoles el primer tramo del carril, que comenzó a construirse el pasado mes de marzo con una inversión de 4 millones de euros y un plazo de ejecución de doce meses.

En concreto han visitado el tramo de 800 metros que discurre en los números pares del paseo de la Castellana, entre Raimundo Fernández Villaverde y la Plaza de Lima, de los cuales 500 metros ya han sido asfaltados, restando otros 300 metros que se asfaltarán en los próximos días.

Una vez finalizado, este tramo no quedará habilitado para los ciclistas hasta que se complete toda la actuación de la primera fase, debiéndose dotar de continuidad al carril en los cruces de las plazas de Cuzco, Lima y de Castellana.

La primera fase del carril bici de Castellana supondrá la construcción de 4,4 kilómetros de carril bici unidireccional entre plaza de Castilla y Raimundo Fernández Villaverde (2,2 kilómetros cada una, además de una sección transversal media de 2 metros, situadas entre cada bulevar y la vía lateral).

Los trabajos se están llevando a cabo “sin ninguna incidencia” y “cumpliendo los plazos previstos, de tal manera que vamos a cumplir ese calendario y ponerlo en servicio en marzo de 2023”, ha comentado Carabante, al tiempo que ha explicado que ahora mismo “se están llevando actuaciones en los puntos más conflictivos o que afectan más al tráfico y la circulación, aprovechando el mes de agosto en el que se produce una reducción sustancial del tráfico y la circulación, para evitar esos perjuicios”.

120 PLAZAS MENOS DE APARCAMIENTO DE COHCES

La nueva infraestructura “va a permitir que 4.000 ciclistas todos los días transiten por este carril bici”, y “va a permitir eliminar el 10 % de la circulación de los coches y las motocicletas, de tal manera que va a haber un trasvase del vehículo privado a la bici”, ha señalado el delegado del PP.

Ese trasvase va a suponer eliminar 187 toneladas de dióxido de carbono (CO2) y 3.119 kilogramos de óxido de nitrógeno, y por tanto “va a contribuir a mejorar la calidad del aire”, ha apostillado Carabante.

Según ha explicado, para llevar a cabo el carril bici en todo este primer tramo se van a eliminar 120 plazas de aparcamiento para coches al acabar con la metodología del aparcamiento en batería, aunque lo que no se va a eliminar son carriles de circulación, puesto que el Ayuntamiento apuesta por hacer “compatibles” el vehículo privado y la movilidad personal.

En la ordenanza de movilidad aprobada por el equipo de Gobierno de PP y Ciudadanos “se apostó por los carriles multimodales”, por hacer “compatible” en la ciudad “la bici con los patinetes y el resto de vehículos de movilidad personal”, por lo que los patinetes podrán circular por este carril igual que una bicicleta, como sucede en el resto de vías ciclistas.

En total, el carril bici de Castellana contará con 13 kilómetros unidireccionales, 6,5 kilómetros en cada una de las direcciones segregados.

“Estamos trabajando en el proyecto de redacción de las cinco fases siguientes, que previsiblemente se pondrán a empezar a licitar a partir del año que viene o en la próxima legislatura”, ha añadido el responsable de Medio Ambiente y Movilidad.