Vista general del incendio forestal declarado en el término municipal de Villanueva de Viver. EFE/Manuel Bruque

El incendio de Castellón, en una situación “crítica” al cruzar a un barranco

Castelló/Teruel (EFE).- La situación del incendio forestal que se inició ayer en el término municipal de Villanueva de Viver (Castellón) es “crítica” al haber pasado a un barranco de difícil acceso, donde se trabaja desde el aire para intentar que no avance hacia la Sierra de Espadán, en el flanco derecho.

La consellera de Justicia de la Comunitat Valenciana, Gabriela Bravo, ha informado en el Puesto de Mando Avanzado (PMA) de la evolución del incendio, después del último vuelo de reconocimiento que se ha realizado con el fin de examinar la situación para trabajar en la estrategia para actuar en las próximas horas.

Según ha explicado, las llamas avanzan por el flanco derecho en dirección a Montanejos y ha dado el salto al barranco, uno de los temores de los miembros del equipo de extinción.

Menos veloz que los incendios del verano

Sin embargo, Bravo ha precisado que “no avanza con tanta velocidad” como ocurrió en los incendios del pasado verano en la Comunitat Valenciana, y ello favorecerá los trabajos para poder frenarlo, que se van a realizar sobre todo por aire por los problemas de visibilidad que está provocando el humo.

Se ampliarán los medios terrestres con refuerzos procedentes de Murcia -que también ha facilitado un medio aéreo-, de los consorcios provinciales de Castellón y Alicante y de los ayuntamientos de Castelló y València, que posibilitarán que más de 500 personas trabajen sobre el terreno.

“Hay que ser prudentes porque el fuego sigue avanzando; tenemos ese flanco derecho que pone en riesgo la Sierra de Espadán y no puedo avanzar mucho más”, ha señalado la consellera.

Bravo ha afirmado que la situación del incendio “sigue siendo crítica” pero confía en que las condiciones meteorológicas de esta tarde, en la que se espera más humedad, sobre todo hacia la noche, favorezcan que la llama no avance con tanta velocidad y se contenga el fuego.

Sin nuevas evacuaciones

La consellera ha informado asimismo de que en este momento no se contemplan nuevas evacuaciones, aunque no se descartan si el incendio ampliara el frente y pudiera poner en riesgo otras poblaciones.

“Tenemos que ver cómo va avanzando la tarde, si la meteorología ayuda la estrategia es actuar con medios aéreos porque está en un barranco con mucha profundidad y combustible”, ha precisado, al tiempo que ha indicado que se actuará en consecuencia a la evolución del incendio, que hasta ahora no ha afectado a ningún núcleo urbano.

Respecto a las personas evacuadas por el incendio, unas 1.500 según los últimos datos, ha señalado que van a tener que estar fuera de sus casas las próximas 24 o 48 horas como medida preventiva. “Son situaciones difíciles pero tenemos que tomar medida para proteger vida de las personas”, ha manifestado.

En cuanto a las hectáreas afectadas, ha indicado que podrían alcanzar ya entre las 3.500 y 3.800 hectáreas, en un perímetro de unos 30 kilómetros.

Viento y altas temperaturas, enemigos ante el incendio

El viento y las altas temperaturas complican la extinción del primer gran incendio forestal del año, que hasta el momento ha obligado al desalojo de unas 1.750 personas.

Según las primeras hipótesis que barajan los técnicos, el fuego habría tenido su origen en una mala práctica durante una quema agrícola.

La evolución del fuego podría complicarse en las próximas horas por las elevadas temperaturas, que alcanzan ya los 20 grados, y el viento de poniente, “complejo y complicado” y con rachas que pueden alcanzar los 40 kilómetros/hora, ha advertido el secretario de Seguridad y Emergencias de la Generalitat, José María Ángel.

Las previsiones meteorológicas para el día de hoy “no son aliadas” ni “esperanzadoras” y “dificultan mucho la extinción”, a lo que hay que sumar una orografía “muy complicada”, ya que se trata de una zona de barrancos y grandes desniveles, ha añadido.

La situación se complica también por la sequedad del terreno pues, en los últimos meses, en la zona ha llovido menos de la mitad de lo normal.

Mejora la situación en Aragón

Según el Gobierno de Aragón, en la parte que afecta a la comunidad, el fuego evolucionó de manera favorable durante la noche y habría afectado en la zona a unas 800 hectáreas.

Mientras se da por asegurado el flanco izquierdo, prosiguen los trabajos para estabilizar la cabeza del fuego, en una zona más compleja por los accesos y la orografía.

Las labores de extinción las desarrollan tres cuadrillas helitransportadas, siete cuadrillas terrestres y seis autobombas y está previsto la incorporación, en el flanco aragonés, de tres brigadas del Ministerio.

En Aragón se mantiene activo el Nivel 1 del Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Indendios Forestales (PROCINFO) y, por el momento, continua el desalojo preventivo de la localidad de Olba y de varias masías y pequeños núcleos de San Agustín.

En total, ayer se evacuó alrededor de 250 personas, que se realojaron en establecimientos hoteleros, principalmente en Venta del Aire y en domicilios particulares y que, según el jefe de servicio de Seguridad y Protección Civil, Miguel Ángel Clavero, todavía no pueden volver a sus casas.