Una "experiencia inmersiva" con siete Guerreros de Xi'an y uno de sus caballos es la tentadora propuesta que ofrece desde hoy y hasta el 28 de enero de 2024 el Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) a partir de la primera exposición con piezas originales de las famosas esculturas de terracota que sale al exterior de China tras la pandemia sanitaria de la covid-19.EFE/ Manuel Lorenzo

Paseo “inmersivo” con los Guerreros de Xi’an en el Arqueológico de Alicante

Antonio Martín | Alicante (EFE).- Una “experiencia inmersiva” con siete Guerreros de Xi’an y uno de sus caballos es la tentadora propuesta que ofrece desde hoy y hasta el 28 de enero de 2024 el Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) a partir de la primera exposición con piezas originales de las famosas esculturas de terracota que sale al exterior de China tras la pandemia sanitaria de la covid-19.

‘El Legado de las Dinastías Qin y Han, China. Los Guerreros de Xi’an’ está formada por 124 piezas o conjuntos originales de nueve museos chinos donde destacan los siete soldados y el caballo aunque hay otras muchas obras de valor, y se ha abierto al público este martes con la asistencia del ministro de Cultura y Turismo del gigante asiático, Hu Heping, y el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, de cuya institución depende el MARQ.

Con vitrinas circulares (360 grados) en medio de la sala, la tercera y última estancia de la exposición pretende ser una experiencia “inmersiva” para el visitante junto a los famosos guerreros de terracota provenientes del mausoleo del primer emperador y unificador del territorio de China, Qin Shi Huang, hallados hace medio siglo en Xi’an y considerados por muchos como la octava maravilla del mundo.

Ver a los guerreros a escasos centímetros

Esas modernas vitrinas permiten al visitante pasear entre los soldados y verlos a escasos centímetros para casi “casi tocarlos” oyendo una música especialmente diseñada para esta exposición, con una iluminación adecuada que realza a las figuras de una colección “única”, en palabras del comisario, el catedrático gallego de la Universidad de Cambridge Marcos Martiñón-Torres.

Un general junto a arqueros, aurigas, lanceros, conductores de carros y soldados de apoyo componen este elenco de Guerreros en los que se distingue perfectamente el detalle de cada tocado del pelo en función de su grado militar. La sala concluye con las figuras del mausoleo de Yanling, un ejercito también de terracota de la dinastía Han que ilustra la continuidad de unas tradiciones que llegan hasta la actualidad.

Pero además de los guerreros destacan otras dos figuras civiles de terracota, se trata de un asistente sentado y de un hombre arrodillado que algunos creen que podía ser un pescador, que se sitúan junto a una pequeña teja rota que sirve de homenaje a los miles de trabajadores artesanos que fabricaron los Guerreros porque sirve de epitafio al revelar la identidad de uno de estos “invisibles”, muchos de los cuales acabaron sepultados con su emperador.

Antes de esa tercera sala principal de la colección, hay otras dos donde, en la primera, se hace un repaso a los 500 años anteriores a Qin Shi Huang y a la inmediatamente posterior dinastía Han (del 770 al 220 a.C.) para que el visitante se adentre en la vida nobiliar y la burocracia estatal mediante bronces rituales, enormes campanas que suenan distintas que las europeas y adornos de jade.

Armas letales en un ambiente con olor a cerezo

Con un escogido olor a cerezo, árbol que llegó a China en ese periodo, se exhiben armas letales, como el sable de un general, monedas, unidades de volumen y objetos exóticos que llegaban a través de la Ruta de la Seda, y la reproducción de un monolito con una inscripción del periodo de los Reinos Combatientes (475-221 a.C.), para reflejar la primera muestra conocida de la caligrafía china que se reformó durante la etapa Qin y que ha pervivido hasta hoy.

La segunda sala tiene como epicentro el mundo de los muertos con numerosos objetos funerarios que sepultaban para utilizarlos en la vida póstuma ya que el primer emperador estaba convencido de que gobernaría eternamente.

Para ello, preparó un palacio subterráneo para vivir para siempre protegido por el ejército de terracota, donde se incluyen piezas cerámicas de animales fantásticos, instrumentos musicales (un litófono) y objetos de oro y plata.

Presidida por la silueta del primer emperador chino, en la sala hay uno de los elementos más espectaculares del mausoleo: la reproducción de un carro de bronce de 1.200 kilogramos de peso tirado por cuatro caballos y compuesto por más de 3.000 piezas con diferentes pigmentos que, seguramente, utilizó Qin Shi Huang para ser dirigido a su tumba eterna.

El ministro de Cultura chino se felicita de esta colaboración museográfica

El ministro de Cultura chino, Hu Heping, se ha felicitado de esta colaboración museográfica para celebrar el 50 aniversario de las “amistosas” relaciones diplomáticas entre los dos países y ha confiado en que el público español disfrute de una muestra que pone en valor lo mejor de la cultura de China.

Ha relatado que la provincia de donde provienen las piezas de terracota, Shaanxi, es una de las referencias en el imaginario colectivo de China por su larga historia, por lo que está convencido de que la muestra ayudará a reforzar el conocimiento de su país en España.

Ante la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Aitana Mas, el alcalde anfitrión, Luis Barcala, y el director del MARQ, Manuel Olcina, entre otros muchos, el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, ha asegurado que durante los diez próximos meses esta ciudad se convierte en un escaparate internacional de la cultura china a través de “uno de los descubrimientos arqueológicos más espectaculares de la humanidad”, y ha manifestado que de esta manera arrancan los actos culturales por los 50 años de relaciones España-China.