València (EFE).- La inspección educativa de la Generalitat investiga qué ha ocurrido con exactitud con un niño que se quedó dormido y fue olvidado en el autobús cuando se dirigía al colegio CEIP Santo Ángel de la Guarda de València.
Así lo han indicado a EFE fuentes de la Conselleria de Educación, que han confirmado que el niño se “encuentra perfectamente” y han recordado que “los monitores de los autobuses son contratados por empresas, no por la Conselleria”.
El conductor le vio y llevó a clase
Según ha publicado este jueves el diario Levante-EMV, el conductor se dio cuenta de la presencia del niño de 4 años cuando revisó el autobús y lo llevó al colegio en su coche particular; la familia ha presentado una queja ante la inspección educativa y en la empresa de autobuses.
Consultada por EFE, la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos Provincia de Valencia (FAMPA Valencia) ha señalado que el AMPA del citado colegio público les comunica a diario incidencias que “siguen teniendo con el transporte escolar, como que llega tarde o solo hay un autobús”.
“Ayer contaron que se dejaron un niño olvidado en el autobús y cuando iban de camino a la cochera se dieron cuenta de que estaba y lo llevaron de vuelta al colegio”, han concluido.
El secretario del AMPA del colegio, Antonio Richart, ha explicado a EFE que los hechos se produjeron el pasado lunes y “cuando el conductor se dio cuenta de que el niño se había quedado en el autobús porque se había dormido, enseguida lo llevó al colegio y avisaron a la familia, que ha presentado una queja formal a la Conselleria”.
Deficiencias del servicio de autobús
Richart ha explicado que llevan todo el curso “sufriendo las deficiencias del servicio de autobús, que lleva a cabo la empresa Monbús”.
“Al principio de curso hubo un cambio en la contrata por parte de la Conselleria y desde entonces todo ha sido un lío; el traspaso no se hizo como debía”, ha indicado para detallar que han presentado “un montón de quejas” al respecto pero “todo sigue igual”.
Retrasos “muy frecuentes”, “bastante rotación de monitores”, ausencia de autobuses y cambio de vehículos por otros de otra empresa son algunos de las deficiencias que han sufrido en el servicio, que usan “entre 80 y 100 alumnos” del centro, según Richart, quien añade: “Entendemos que hay un incumplimiento de contrato y se debería anular la contrata”.
