Imagen tomada desde el exterior del recinto del escenario principal del Festival Medusa de Cullera (Valencia). EFE/Natxo Frances/Archivo

Citan a declarar como investigados a los responsables del Medusa

València (EFE).- Citan a declarar como investigados a los responsables del Medusa. El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Sueca ha citado a declarar en calidad de investigado al representante legal de la empresa organizadora del festival Medusa por el derrumbe, este verano, de varias estructuras que causaron la muerte de un joven y heridas a varias docenas.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), el juez ha citado también como investigados a los responsables de las dos empresas implicadas en la dotación y montaje de las estructuras del festival, al arquitecto responsable del proyecto técnico, y a un responsable de la empresa externa contratada por el Ayuntamiento para la supervisión de esa infraestructura.

Este juzgado investiga la muerte de un asistente al festival y las lesiones sufridas por otros en la última edición del Medusa, celebrado el pasado mes de agosto en Cullera, debido al derrumbe de varias estructuras durante el vendaval causado por un reventón térmico.

Fuentes de la empresa organizadora del festival han explicado a EFE que acudirán a la llamada del juez para dar todas las explicaciones necesarias pues son los primeros interesados en que esta situación se aclare.

Asimismo, destacan que uno de los informes periciales presentados ante el juzgado señala que aun cumpliéndose la normativa vigente para la instalación de carpas y estructuras móviles, la estructura del festival se hubiera venido abajo, pues las exigencias legales son insuficientes para soportar los vientos que esa noche soplaron en Cullera.

Un muerto y varios heridos

En la madrugada del sábado 13 de agosto, varias estructuras del festival se vinieron abajo y atraparon a decenas de los miles de jóvenes que abarrotaban el recinto.

Uno de ellos, un chico de 21 años de Daimiel (Ciudad Real), murió y una treintena de asistentes -la cifra final nunca se ha concretado, pues la mayoría abandonó el recinto del festival en coches particulares- tuvo que ser trasladada a centros hospitalarios.