Ximo Puig defiende la rebaja fiscal a la empresa familiar que rechazan sus socios

València, 19 nov (EFE).- El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha defendido este jueves la rebaja de impuestos a las empresas familiares para generar “menos problemas” en su sucesión y más arraigo en el territorio, frente a la oposición que mantienen sus socios de Gobierno, Compromís y Unides Podem.
Durante la sesión de control en Les Corts Valencianes, la síndica de Compromís, Papi Robles, ha reprochado que los socialistas pretendan presentar una enmienda a la ley de acompañamiento para que las empresas familiares que facturan más de 10 millones de euros tengan una bonificación al 99 % del impuesto de Sucesiones.

Una propuestas sin impacto económico relevante

Tras afirmar que la propuesta “debilita los servicios públicos, rompe acuerdos del Botànic y no ayuda a mejorar la economía”, Robles ha instado a “cuidar” y “cultivar” el Botànic, y ha alertado de que sería un “gran error” que el PSPV-PSOE siguiera adelante con la propuesta “unilateral” de “bajar impuestos a los más ricos”.
El president ha replicado que se trata de una propuesta “abierta” que además no tendrá un impacto económico “relevante” -ha señalado que probablemente no llegará al medio millón de euros-, de manera que no están “poniendo en cuestión el Estado del bienestar”.
Ha destacado que esta medida busca proteger a las empresas familiares valencianas para que cada día tengan un tamaño superior, que es la manera de “conseguir mejores sueldos, entre otras cosas”, y que no se pierdan ni su arraigo ni su singularidad.
La síndica de Unides Podem, Pilar Lima, también se ha referido a esta cuestión para señalar que está “preocupada”, porque a su juicio no se está “teniendo en cuenta” en el Consell que más del 80 % de españoles están de acuerdo y muy de acuerdo con los que más tienen aporten más, según el CIS.
“No se preocupe, en esta Comunitat van a continuar pagando aquellos que tienen más recursos, no le quepa a menor duda”, le ha respondido el president, mientras que desde Ciudadanos le han ofrecido sus votos para aprobar la rebaja fiscal a la empresa familiar.

Avences en la gigafactoría

Durante la sesión de control, el president ha anunciado que la empresa Power Co, perteneciente al grupo Volkswagen, comprará antes de acabar el año el suelo a Espais Económics Empresarials de Parc Sagunt II para poder iniciar las obras de la gigafactoría de baterías en Sagunto, dentro del plan previsto por la multinacional.
En este sentido, ha destacado que un día después de que Volkswagen aceptara las ayudas públicas del PERTE se ha publicado en el Diari Oficial de la Generalitat la petición de la empresa de que esta iniciativa se declare proyecto estratégico territorial (PET).
Las síndicas del PP, María José Català, y Ciudadanos, Ruth Merino, han celebrado la decisión de Volkswagen de mantener la gigafactoría en Sagunto (Valencia), aunque han reprochado la falta de ayudas y de sensibilidad del Gobierno valenciano hacia las pymes y autónomos.
Català ha denunciado que el Consell está haciendo poco por el pequeño comercio, que está ahogado por el aumento de los costes energéticos, y se ha referido a la campaña del Gobierno para evitar el malgasto energético para afirmar que el único “derrochólico” es el Ejecutivo valenciano.
En la misma línea, Merino ha criticado la “falta absoluta de sensibilidad” que presentan las políticas del Botànic ante “la dramática” situación que están viviendo las familias y las empresas valencianas, marcada principalmente por la inflación “desbocada” y por las “deficiencias” en los servicios públicos.
El president ha afirmado que las políticas de su gobierno son “adecuadas” porque “avanzan en la dirección correcta, dan resultados concretos y ayudan a la mayoría”, y ha defendido que el Consell empatiza “con todos los problemas de la ciudadanía” y es el que más recursos ha empleado para ayudar a familias.

Cortar la corrupción

La síndica de Unides Podem, Pilar Lima, ha reclamado mecanismos que blinden y protejan la democracia frente a quienes intentan asaltarla, tras advertir de la relación entre las redes de corrupción institucional en la Comunitat y los principales responsables de los casos de “lawfare” (guerra jurídica) en nuestro país.
Puig ha revindicado que desde 2015 se ha conseguido levantar la hipoteca reputacional que pesaba sobre la Comunitat Valenciana y cambiar el paradigma, con políticas que han “cortado de raíz” la corrupción.
El president también ha acusado a Vox de estar en contra de la Unión Europa, después de que su síndica, Ana Vega, haya denunciado que los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030 tienen unos “efectos devastadores” para el sector primario.