Un niño observa un puesto de una librería. EFE/Javier Etxezarreta

Francia fija una tarifa mínima de 3 euros en los pedidos de libros en Amazon y otras plataformas

París (EFE).- El Gobierno francés publicó este viernes un decreto que fija como mínimo en 3 euros los gastos de envío de libros comprados en Amazon y otras plataformas digitales, en un intento de proteger a las librerías tradicionales.

La medida, que entrará en vigor el próximo 7 de octubre, sigue las recomendaciones de la Autoridad de Regulación de Comunicación Electrónica, Correos y Distribución de Prensa (Arcep), que había propuesto en abril de 2022 una tarifa mínima de 3 euros en gastos de envío para todos los pedidos inferiores a 35 euros.

El decreto no afecta, sin embargo, a los pedidos superiores o iguales a 35 euros, para los que el precio mínimo estará en 0,01 euros.

Incentivar la compra de libros en negocios de Francia

El objetivo del Gobierno es incentivar la compra en las librerías francesas, que conforman una de las redes más densas del mundo: se calcula que existen alrededor de 3.500 en el país y que venden aproximadamente la mitad de los libros comercializados en Francia.

Estos comercios no pueden competir en muchas ocasiones con los precios de distribución que ofrecen las plataformas digitales (el precio del libro es, en principio, fijo en Francia), y en particular Amazon, que acapara buena parte del mercado.

Por ello, el Sindicato de la Librería Francesa (SLF), que aglutina a cerca de un tercio de las librerías independientes, pedía una tarifa mínima de 4,5 euros, más elevada que la aprobada ahora por el Gobierno.

El Ejecutivo justifica su decisión de los 3 euros por el aumento de la inflación en el país, así como para respetar las normativas europeas de libre mercado.

Estanterías de una librería de Francia. EFE/Josep Puig/Archivo

“Esta medida constituye un primer paso para reequilibrar la competencia entre minoristas en el mercado de la venta en línea de libros”, considera en cualquier caso el SLF, que critica la “casi gratuidad” de los pedidos superiores a 35 euros y pide una tarifa postal ventajosa que permita “hacer a las librerías verdaderamente competitivas”.

El decreto se enmarca en la conocida como ley Darcos del 30 de diciembre de 2021 sobre el mercado del libro, una actualización de otra ley de 1981, que ya sufrió modificaciones motivadas por el creciente peso del comercio electrónico y, en particular, de Amazon.

Así, en 2014, se prohibió al gigante tecnológico añadir gastos de envío gratuitos a aquellos libros que ya se vendiesen con una rebaja del 5 % del precio (máximo descuento fijado por ley).