Valladolid, 09 sep (EFE).- Más de 25.000 personas, según fuentes policiales, se congregaron ayer en la Plaza Mayor de Valladolid para ver el concierto grande de la semana de fiestas de la ciudad, donde el estadounidense Jason Derulo hizo pequeño el espacio en un ‘show’ con pocos precedentes en la ciudad del Pisuerga que transcurrió sin incidentes.
Dos horas antes de que comenzara el espectáculo, la Policía Local de Valladolid ya tenía la orden de cerrar todos los accesos a la Plaza Mayor de la ciudad, lo que aventuraba un concierto multitudinario a la altura de lo vivido años atrás, como con Michael Jackson en 1997.
Entre los alicientes que hicieron vibrar a una plaza entregada: una nueva canción estrenada a nivel mundial en Valladolid y que no será lanzada hasta el próximo 30 de septiembre, como avanzó el propio Derulo en una rueda de prensa anterior al concierto.
Tampoco pasó desapercibido el concierto en las redes sociales, que se llenaron de imágenes y vídeos que mostraban que no cabía ni un alfiler en la Plaza Mayor de Valladolid, algo que muchos usuarios aseguraban no haber visto jamás.
“Esta noche no se borrará ya de nuestra mente. Pero tampoco de la de Jason Derulo”, escribía en sus redes sociales el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, que aseguraba que “un artista así nos ayuda a explorar nuestros límites y seguro que a mejorar”, al tiempo que apostillaba: “El año que viene lo intentaremos aunque no va a ser fácil”.EFE
aam
(foto)
