Autobús con los jugadores del Unicaja durante la celebración por las calles de Málaga. EFE/Jorge Zapata

Unicaja, la fórmula del éxito del patrocinador más antiguo de Europa

Alberto Fuentes |

Málaga, 24 feb  (EFE).- Presume de ser el patrocinador más longevo del baloncesto europeo. Cuarenta años apoyando a un equipo que tiene enamorada a toda una ciudad. Unicaja Málaga ha logrado un nuevo éxito con la consecución de su segunda Copa del Rey, el quinto título en sus vitrinas. Tiene un presupuesto de 11 millones de euros, cuatro veces inferior al del Real Madrid y Barça. Estas son algunas de las claves de su éxito.

El Club Baloncesto Málaga se codea desde hace años con la élite del baloncesto continental. Es el quinto presupuesto de la ACB, muy lejos de los más de 40 millones que dedican a sus respectivas secciones azulgranas y blancos, equipos a los que eliminó en la Copa de Badalona la plantilla malagueña que entrena desde hace un año el vitoriano Ibon Navarro, uno de los artífices de su renacimiento.

Ese presupuesto también está muy por debajo del que tienen los otros dos clubes españoles que disputan la Euroliga, el Baskonia y el Valencia Basket, que le superan ampliamente hace años en recursos económicos. Del capital actual del club malagueño, dos millones los aporta su propietario, Fundación Unicaja, y algo más de tres los pone Unicaja Banco, principal patrocinador de la entidad de manera ininterrumpida desde hace cuatro décadas.

Las instituciones públicas como Junta de Andalucía, Diputación Provincial, y los Ayuntamientos de Málaga y Benahavís sumaron alrededor de otros dos millones más y a ello hay que añadir la recaudación de las taquillas, que antes de la pandemia llegó a ser de 1,6 millones de euros. Por último, se cuentan los derechos televisivos y el reparto económico de ACB y Liga de Campeones FIBA, competición en la que participa por segunda temporada consecutiva.

Unicaja es propietario y patrocinador desde la fundación del Club. “Un hecho sin parangón en los últimos 40 años del deporte en Europa. Unicaja y baloncesto van de la mano en Málaga”, presumen en la web oficial de un club que componen, en términos legales, dos entidades: Baloncesto Málaga SAD, de la que depende el equipo profesional, y Unicaja Sociedad Deportiva, responsable de todos los equipos de cantera.

Una prolífica cantera que cuenta con jóvenes promesas repartidas en equipos desde preinfantil hasta la categoría junior. El club se ha ayudado de la Escuela de Baloncesto de Los Guindos como una herramienta que surgió como promoción del Club Caja de Ronda para impulsar el baloncesto masculino y femenino desde edades tempranas.

Y de ella han salido en estos 40 años un centenar de jugadores que han debutado con el primer equipo en ACB. Entre ellos, campeones del mundo como Carlos Cabezas o Berni Rodríguez -actuales embajadores del Unicaja-, históricos como Fran Vázquez, jugadores de la actual plantilla como su capitán y líder, el campeón de Europa Alberto Díaz, o Augusto Lima y hasta estrellas que destacan en la NBA como Domantas Sabonis o que pasaron por la Liga estadounidense como Álex Abrines, actual jugador del Barça.

Para mantener los proyectos de cantera, donde destacan el Junior de Liga EBA y el Unicaja Mijas femenino, cuentan con el apoyo de la Fundación Unicaja. Su última aportación fue de 600.000 euros para seguir apostando por la formación de jóvenes talentos.

Tras una temporada 2021/22 con los últimos coletazos de la pandemia y, por tanto, sin normalidad en la campaña de abonos, para la presente se buscó un cambio radical para recuperar a los aficionados que fueron vaciando las gradas por los malos resultados. El Covid también tuvo mucho que ver: el pabellón Carpena, a medio llenar, y la venta de entradas o bonos de partidos, muy limitada.

Pero la tranquilidad de tener una entidad fuerte detrás, la apuesta permanente por la cantera y el acierto del pasado verano de la dirección deportiva -que optó por resetear una plantilla que no terminaba de carburar y contrató a nueve jugadores- ha terminado dando sus frutos. Dieciocho años después, el Unicaja es campeón de Copa del Rey.

El equipo ha vuelto a sonreír y ha logrado restablecer el sentimiento de pertenencia con el aficionado en una eficaz campaña de abonos que ha vuelto a llenar las gradas del Pabellón Martín Carpena, con capacidad para más de diez mil aficionados, de los que 7.200 son abonados, según los datos facilitados a EFE por la propia entidad actualizados a febrero de 2023.

Porque el efecto “Copa del Rey” ha sido inmediato. Ya no quedan entradas para el primer partido que acogerá el recinto malagueño, el 4 de marzo frente al Basquet Girona, y lo mismo ocurrirá con los siguientes, frente al Barça en Liga y al Galatasaray turco en Liga de Campeones. Algo impensable hace un año.

Desde el inicio de temporada, el juego del equipo ha devuelto la ilusión a una de las aficiones más entusiastas de España y el colofón ha sido la Copa conquistada el pasado fin de semana en Badalona. Al regreso del equipo la locura se desató en una Málaga en la que dicha alegría contrasta con las decepciones de su equipo de fútbol, que no levanta cabeza en la Liga SmartBank y sigue en puestos de descenso.

El Club Baloncesto Málaga comenzó en verano de 2022 una revolución de proyecto con un nuevo presidente, tras el nombramiento del exárbitro profesional Antonio Jesús López Nieto. Hasta su elección, López Nieto era asesor de arbitraje en LaLiga y representante de la Junta de Andalucía en el Patronato de la Fundación Unicaja.

En la parcela deportiva, confió en Juanma Rodríguez como director deportivo, quien le dio un año de contrato a Ibon Navarro para que continuara como entrenador. En la gestión del club, se destinó aproximadamente el 70 por ciento del presupuesto a la plantilla que solo mantuvo a tres jugadores y se apostó por una campaña de abonos que apelara a lo sentimental, tras dos temporadas sin funcionar por los problemas derivados del Covid-19.

Con fórmulas como el 30% de descuento para jóvenes entre 15 y 30 años y del 50% para los niños entre 5 y 14 años, o incluyendo ventajas tanto para los renovados como también para nuevos, el Carpena se fue llenando triunfo a triunfo hasta que la media de asistencia al pabellón ha superado los 8.000 espectadores, la segunda mayor de la Liga Endesa.

El Unicaja de Málaga es uno de los clubes históricos de la ACB y cuenta con cinco títulos en sus vitrinas: una liga ACB (2005-2006), dos Copas del Rey (2005 y 2023), una Eurocopa (2016-2017) y una Copa Korać (2000-2001), además de dos subcampeonatos ligueros (1994-1995 y 2001-2002).

Su éxito, curiosamente, tiene su germen en una fusión de la que esta temporada se ha cumplido el 30 aniversario. El Unicaja que conocemos en la actualidad fue fundado como CB Málaga en 1992, y nace de la unión entre dos equipos malagueños que competían en la ACB, el Caja de Ronda y el Mayoral Maristas.

Dicha integración, que tuvo sus detractores en sus inicios, se ha demostrado exitosa. Apoyado en su gran masa social y en una idiosincrasia donde la promoción de la cantera es uno de sus principales valores, la entidad se sigue reinventando para intentar pelear con los grandes del baloncesto europeo. Con muchos menos recursos pero convencidos de que en el deporte hay factores a veces mucho más importantes que tener dinero. Porque en su caso el secreto está, sobre todo, en saber utilizar bien el que se tiene