Barcelona (EFE).- El Govern ha aprobado este jueves los presupuestos de la Generalitat para 2023, que incluyen un aumento del gasto de 2.885 millones de euros, un 7,6 % más que en 2022, gracias principalmente a una mejora de la recaudación fiscal.
Las cuentas presentadas hoy, que el Govern de ERC ha consensuado tanto con el grupo de los comunes como con el PSC, ascienden a 41.025 millones de euros, lo que supone un máximo histórico, si bien cada nuevo presupuesto acostumbra a ser récord, al superar al anterior.
Sin tener en cuenta la asignación de fondos europeos Next Generation para este ejercicio (1.185 millones), que ha caído un 44,7 % en relación a 2022, el gasto aumenta un total de 3.842 millones, un 10,7 % más, hasta los 39.839 millones, ha subrayado la consellera de Economía, Natàlia Mas, que ha resaltado que se trata de la mayor subida anual en términos absolutos de los últimos 17 años, es decir, desde 2006.

Si las cuentas de 2022 se vieron impulsadas por los fondos europeos, el crecimiento de las de 2023 se sustenta en el impulso de los ingresos no financieros no finalistas, que suben 4.152 millones (+ 15,2 %), hasta los 31.408 millones.
Este aumento en los ingresos se explica básicamente por el modelo de financiación (tanto los anticipos como la liquidación de 2021, que aporta unos 1.980 millones), que aportará 25.236 millones en 2023, un 20,6 % más, debido al tirón de la recaudación fiscal.
La Generalitat prevé también que los impuestos propios y cedidos crezcan un 6 %, hasta los 4.964 millones.
Salud y educación, a la cabeza, con un gasto social algo rebajado
Los departamentos de Salud y Educación concentran el 55 % del incremento del gasto por consellerías incluido en el proyecto de presupuestos de la Generalitat para 2023.
En concreto, el departamento de Salud, que tradicionalmente es el que copa el mayor volumen de gasto, prevé destinar 11.636 millones, 1.022 más que el año pasado, lo que supone un crecimiento del 9,6 %.
Si no se tienen en cuenta los fondos europeos Next Generation, el gasto de esta consellería se incrementa en 1.128 millones, un 11 % más.
Por su parte, la consellería de Educación aumenta su gasto en 405 millones en relación a 2022, un 6,2 %, hasta los 6.960 millones. Sin los Next Generation, el gasto crecería en 675 millones, un 11 % más.
El gasto global de todos los departamentos es de 33.884 millones, lo que supone 2.557 millones más que el año pasado, un 8,2 % más. Quitando los fondos europeos, el gasto se quedaría en 32.699 millones, un 11,7 % más (3.430 millones).
En su conjunto, el peso social de las cuentas es del 73,2 %, algo por debajo del 74,6 % del año pasado, una reducción que el ejecutivo atribuye al aumento de los intereses y al fuerte incremento que registran este año partidas no sociales como las destinadas al impulso de la industria y a las políticas activas de empleo.
Las remuneraciones crecen un 10 % y concentran un tercio de gasto
Por otra parte, las remuneraciones del personal del sector público de la Generalitat, es decir, los funcionarios y los empleados de las empresas públicas, crecerán este año un 10,6 %, es decir, 1.416 millones de euros, hasta suponer un total de 14.787 millones.
Eso supone que, de un presupuesto total de 45.359 millones, el que engloba a la Generalitat y a todas sus empresas públicas, un 32,59 % se destina al pago de nóminas. De esta forma, de los 3.190 millones de aumento del gasto de todo el sector público, la partida de retribuciones se lleva 1.416 millones, es decir, un 44 %.
Las cuentas para 2023 incluyen en este sentido un incremento de 12.255 plazas estructurales en relación con 2022.
Tramitación en tiempo récord de los presupuestos de Cataluña y puerta abierta a Junts
Las cuentas se tramitarán en un tiempo récord, en apenas 37 días, frente a los 45 días que tardaron las de 2022, con la idea de que estén aprobadas el 10 de marzo.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en una comparecencia en el Palau de la Generalitat, ha instado a Junts a anteponer “el interés de país” y a sumarse al acuerdo sobre el presupuesto, del que ha dicho que “no es uno más, sino un presupuesto de país”.
Las cuentas de 2023 presentadas hoy en el Parlament no incluyen estimaciones sobre los ingresos que pueden aportar los nuevos impuestos pactados con los comunes a cambio del apoyo de este grupo a los presupuestos, ni reflejan por el momento los acuerdos sellados con el PSC -no hay dotaciones presupuestarias específicas para el nuevo Hard Rock ni para la B-40, que es de titularidad estatal-.