Madrid (EFE).- La gestación subrogada sigue en el debate político, aunque el PP lo ha enfriado al decir que no toca ahora abordarlo, justo un día después de abrirse a una regulación, mientras que el PSOE mantiene su rechazo a esta práctica ilegal en España y añade que “no es deseable que se haga en el extranjero”.
El caso de la actriz Ana Obregón, que a sus 68 años ha sido madre por gestación subrogada en Miami, reabrió un debate político que continúa este jueves y que está obligando a los partidos a afianzar o aclarar sus posiciones, en algunos casos aún con dudas sobre ciertos asuntos.
Por ejemplo, la dirección nacional del PP se inclinó por abrir un debate para regular esta práctica con el requisito de que sea de forma altruista y no exista “en ningún caso” pago económico indirecto o directo a la madre gestante.
Sin embargo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha señalado este jueves desde Lisboa que es partidario de abrir un debate sobre este asunto, pero “no ahora”, porque cree que “no es el momento” en la situación política española.
“Es evidente que el principal problema que tenemos en España en este momento no es cerrar este asunto. El principal problema que tenemos es parar la sangría de excarcelaciones y la sangría de rebaja de penas de los violadores y de los abusadores sexuales en España. Esto es lo urgente, esto es lo prioritario”, ha añadido.
No obstante, Feijóo ha insistido en la necesidad de debatir más adelante aspectos como la inscripción en España de niños nacidos por gestación subrogada en el extranjero, un asunto sobre el que ha puesto este jueves el foco el PSOE.
El PSOE plantea reforzar la ley para impedir traer niños de gestación subrogada
El que ha llegado más lejos ha sido el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, que ha planteado la posibilidad de “reforzar” la legislación actual para “impedir” que haya personas que hagan uso de la gestación subrogada en el extranjero, aunque ha subrayado que hay que estudiar la fórmula para no “cargar las culpas al niño”.
Posteriormente, fuentes del grupo parlamentario socialista han aclarado que no están trabajando en ninguna iniciativa concreta, mientras que desde Ferraz han recordado que la gestación subrogada es ilegal en España y consideran que “no es deseable que se haga en el extranjero”, pero han insistido en la idea de que no se debe “hacer caer el peso sobre un menor por los actos de un adulto”.
Pero en el PSOE el debate ha tenido una consecuencia política, ya que el médico Oriol Lafau, que ocupaba el sexto puesto de la lista al Parlament balear por Mallorca para las elecciones de mayo, ha renunciado a su candidatura tras hacerse público que es padre por gestación subrogada.
Cs lleva de nuevo al Congreso su propuesta para regular la gestación subrogada
Por su parte, Ciudadanos ha aprovechado la polémica para registrar nuevamente en el Congreso una proposición de ley para permitir la llamada gestación subrogada “altruista”, como ya hizo en 2017, lo que obligará a todos los partidos a posicionarse cuando se debata esta iniciativa en el pleno.
Además, la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha cargado contra el PP, acusándolo de hacerse “el loco” y ser un “blandiblú” respecto a la regulación.
Las dudas del PP
Y es que la gestación subrogada genera debate en el seno del PP, donde no todos comparten la propuesta de regularizar la gestación subrogada.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ha dicho que no se atreve a dar “una opinión categórica” al respecto y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha limitado a criticar a la izquierda por “decidir cómo hemos de vivir” y por “señalar” a personas como Ana Obregón.
También el portavoz de campaña del PP, Borja Sémper, ha puesto el acento en lo que considera una falta de “sororidad” y ha indicado además que registrar en España a niños nacidos con gestación subrogada en el extranjero está permitido y lo contrario sería condenarlos a una “muerte civil”.
Vox ya reafirmó el miércoles su rechazo a la gestación subrogada, una práctica que también censura la izquierda, empezando por el propio Gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos.
Socios parlamentarios del Gobierno como ERC y Compromís han expresado también su rechazo a la gestación subrogada, ya que consideran que la maternidad no es un derecho sino un deseo y que hay otras vías alternativas como la adopción en lugar de “mercantilizar al ser humano”.
Tampoco ve con buenos ojos la gestación subrogada el líder de Más País, Íñigo Errejón, que ha señalado no obstante que en su caso no tienen problemas si se trata de “comportamientos altruistas”, mientras que el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ha dicho que no es partidario de regular ya que “es muy difícil” garantizar la condición de altruismo o voluntariedad.