La Junta de Andalucía publica el protocolo para atender a las víctimas por sumisión química EFE/Luis Millán/Archivo

Agresiones sexuales por sumisión química: sólo se denuncian entre el 10 y el 20 % de los casos

Santiago de Compostela (EFE).- Solo un 10 % o un 20 % de los casos de agresiones sexuales relacionados con sumisión química son denunciados, apuntan los profesores Antonio Rial, de la Universidad de A Coruña, y Manuel Isorna, de la Universidad de Vigo, coordinadores del primer manual publicado en España que aborda desde una perspectiva “multidisciplinar” el problema.

“Se trata de un problema silente, que están sufriendo miles de víctimas año tras año en España”, ha destacado Antonio Rial, que destaca además que en el 90 % de los casos las víctimas son mujeres.

El experto considera que es necesario que se aporten “datos concretos, concluyentes y rigurosos, que ayuden a cuantificar el problema”, que califica de “emergencia sociosanitaria”.

Rial e Isorna han presentado este lunes en la sede del Colegio de Psicólogos de Galicia el estudio, que lleva por título “Sumisión química y uso de sustancias psicoactivas en las agresiones sexuales. Prevención, detección e intervención de un problema multidisciplinar”.

El experto apunta a que los estudios y los datos aportados por las instituciones coinciden en que han aumentado las denuncias en los últimos años por agresiones sexuales pero que siguen sin denunciarse el 80 % o el 90 % del total de la casuística.

Presentación del libro 'Sumisión química y uso de sustancias psicoactivas en las agresiones sexuales'.
El presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices, (c) recibe a los académicos e investigadores Antonio Rial Boubeta (5i) y Manuel Isorna (3i) que le presentado el libro ‘Sumisión química y uso de sustancias psicoactivas en las agresiones sexuales’ del que son coordinadores, este lunes en Santiago de Compostela. EFE/Lavandeira jr

El manual que aborda la sumisión química en las agresiones sexuales

El manual está compuesto de once capítulos, que abordan el fenómeno desde un punto de vista diferente: desde el ámbito del derecho penal, relacionado con el consentimiento en las agresiones sexuales; el contexto del ocio nocturno y las conductas que se producen en esos espacios; las interferencias con las redes sociales, el fenómeno a nivel global; o las sustancias psicoativas más comunes y sus efectos en el ámbito de la sumisión química.

También aborda el perfil de los agresores, los valores machistas, la cosificación de la mujer o la industria del porno, las violaciones en grupo, la necesidad de recoger las muestras y potenciales evidencias de sumisión química, la custodia de muestras o los protocolos que existen para recoger los testimonios de las víctimas.

“Hay un enorme desconocimiento a nivel institucional, porque hay muchísima confusión a la hora de contabilizar los delitos relacionados con la sumisión química”, ha señalado Rial.

Según ha expresado, el manual tiene como objetivo, por tanto, aportar “claves, pautas, información y herramientas” que ayuden a que los profesionales respondan mejor ante este tipo de situaciones.

Ha incidido en la necesidad de poner “freno” a estas conductas desde un punto de vista “preventivo”, en el que juega un papel fundamental “la educación”.

Por su parte, Isorna ha señalado que no podemos basarnos solamente en las sentencias para hacer una valoración y ha apuntado a se habla mucho de “la burundanga”, cuando es de las sustancias que “menos aparecen” y que el alcohol es la droga más común en casos de vulnerabilidad o sumisión química.

“El consumo de alcohol en altas cantidades multiplica por siete o por ocho el riesgo de victimización”, ha señalado.