Madrid (EFE).- La reforma de la ley del solo sí es sí avanza este martes en el Senado, donde el PSOE ha insistido en la necesidad de modificar los aspectos de la norma que “no funcionan”, manteniendo el consentimiento en el centro, frente a las acusaciones de los socios de investidura que han lamentado que al PSOE “le han temblado las piernas” y ha optado por “retroceder en derechos”.
En un breve debate, la Comisión de Justicia del Senado ha dado luz verde al informe de ponencia de la reforma de la ley de garantía integral de la libertad sexual presentada por el PSOE, que no ha aceptado ninguna de las 41 enmiendas presentadas al texto.
La reforma se votará mañana en el pleno, donde, si no hay sorpresas, quedará definitivamente aprobada con el apoyo del PP y el voto en contra de los socios de investidura del PSOE.
Durante su paso por el Congreso, el PSOE, con el apoyo del PP, introdujo una modificación para crear un subtipo agravado dentro del delito de agresión sexual para que las penas sean más elevadas si hay violencia e intimidación.
El PSOE: “hay que modificar lo que no funciona”
Una corrección que la senadora socialista Donelia Roldán ha vuelto a defender este martes. “Ante la evidencia de las reducciones de condenas, el PSOE no puede quedarse con los brazos cruzados”, ha señalado esta senadora que ha defendido que “hay que modificar lo que no funciona”.
Roldán ha defendido que la ley del solo sí es sí “es una buena ley” y ha asegurado que la reforma no toca el consentimiento, que sigue estando en el centro.
Frente a este argumento, desde ERC la senadora Sara Bailac ha advertido de que ante a los ataques retrógrados solo hay dos caminos: avanzar o retroceder. “Al PSOE le han temblado las piernas y ha elegido retroceder”
Ha afeado que el PSOE se alíe con el PP “que siempre se ha opuesto a los avances de derechos de las mujeres” y ha denunciado que la reforma planteada “afecta al núcleo de la ley” que pasará de ser la del solo sí es sí, a ser la ley del “no dijiste que no”.
Desde el PP, el senador Francisco Javier Márquez ha celebrado la reforma que permitirá solucionar “una chapuza legislativa” que ha “puesto en peligro a miles de mujeres” y ha confiado en que se apruebe “inmediatamente”.
Enfrentamiento con los socios de Gobierno
La reforma de la ley ha puesto en evidencia la ruptura de los socios de Gobierno que, por primera vez, votaron de forma separada la corrección de una norma impulsada desde el propio Ejecutivo.
ERC y Bildu han presentado enmiendas al texto, las mismas que llevaron al Congreso y que fueron rechazadas. Piden que los artículos 178 y 179 de Código Penal se mantengan tal y como están en la ley del solo sí es sí para “proteger el consentimiento como centro de ley”.
Argumentan que la reincorporación de los términos de “violencia e intimidación” como centrales en el tipo penal de agresión sexual “desplaza el consentimiento como el elemento definidor entre una relación sexual consentida y una agresión sexual”.
Unidas Podemos no tiene representación en el Senado, por lo que no ha podido presentar enmiendas, que no obstante iban en la misma línea que las de ERC y EH-Bildu.
El PP, por su parte, ha renunciado a presentar enmiendas.