Madrid (EFE).- Aunque Ciudadanos ha decidido no concurrir a las elecciones del 23 de julio después del hundimiento casi definitivo en las municipales y autonómicas de mayo, cuenta con un colchón de unos 6 millones de euros para poder aguantar más o menos un año sin ingresos, hasta las elecciones europeas.
Fuentes del partido han confirmado a EFE que cuentan con ese remanente que les permite, de momento, no hacer despidos de trabajadores, tal como la dirección ha trasladado este martes a sus empleados.
Otra cosa son las personas que trabajan en el grupo parlamentario del Congreso, cuyos contratos se extinguirán el próximo 16 de agosto, un día antes de constituirse las nuevas Cortes Generales.
La sede de Ciudadanos que se come 26.000 euros mensuales de los ingresos
Los naranjas tienen también pendiente de solucionar el cambio de sede, pero aún no han encontrado un local dentro de la M-30, mucho más pequeño y barato (por la macro sede actual en el número 253 de la calle Alcalá pagan 26.000 euros mensuales), que se adecúe a sus nuevas necesidades.
La dirección de Cs acordó el pasado 30 de mayo no concurrir a las elecciones generales, pero no disolverse, para iniciar lo que han llamado un proceso “de rearme orgánico e intelectual” con el fin de prepararse para el próximo ciclo electoral, concretamente a las europeas de 2024.
Algunos dirigentes naranjas, entre ellos el portavoz adjunto en el Congreso, Edmundo Bal, insisten en que “rendirse no es una opción” y creen que lo que trata de hacer la dirección es “secuestrar el partido” y el dinero para pagar la campaña europea de Adrián Vázquez, el actual secretario general de los naranjas y jefe de la delegación de Cs en el Parlamento Europeo.
Francisco Igea, el único diputado que tiene Cs en Castilla y León, es otro de los más críticos con la decisión de la cúpula de no concurrir el 23J y está hablando con Bal sobre la posibilidad de crear una plataforma con los mismos valores liberales y de centro que, en todo caso, no estaría lista para las generales.