Málaga, 12 sep (EFE).- El coordinador general de Izquierda Unida en Andalucía, Toni Valero, ha asegurado este lunes que el curso escolar comienza en la comunidad con “incertidumbre” porque “no se han adaptado los contenidos educativos a la LOMLOE como marcaban los plazos”, lo que genera un perjuicio.
Ha manifestado en conferencia de prensa que el curso se inicia con “un sistema público más débil” al continuar “los recortes de Moreno Bonilla”, el presidente de la Junta andaluza.
Valero ha afirmado que ello es así “pese al juego de trileros del Gobierno andaluz, que dice que ha aumentado el refuerzo del profesorado”; ante lo que advierte de que “es falso, hay un recorte del 50 por ciento de plazas de refuerzo del profesorado respecto al año pasado, que ya sufrió un recorte acusado”.
Ha indicado que el Ejecutivo andaluz anunció un aumento de 4.200 plazas de profesores, pero precisa que la mayoría cubrirán puestos estructurales que no se atienden por personal fijo; por lo que “el verdadero refuerzo será de 1.700 plazas, un 50 por ciento menos respecto al curso anterior”.
El dirigente de IU ha señalado que se producen cierres de unidades educativas y una temporalidad en el empleo “preocupante”.
Según Valero, el curso se inicia repitiendo el incumplimiento del Gobierno andaluz de la ley de bioclimatización, por lo que alumnos y profesores sufrirán calor en meses estivales y de primavera y frío en invierno.
Toni Valero ha criticado los recortes, los incumplimientos de la ley de bioclimatización y que el Gobierno andaluz use la bajada de la natalidad “como pretexto para cerrar las aulas cuando debe ser una oportunidad para bajar las ratios y mejorar la calidad educativa”.
Ha lamentado que Andalucía sea “la penúltima en financiación educativa” y siga una senda de “privatización en la formación profesional”, donde “faltan plazas públicas” y “se fomenta la del sector privado”, negocio en el que asegura que se ha dejado entrar a los fondos de inversión.
Además, ha resaltado que hay un deterioro de la enseñanza pública y que el privilegio a la privada se refleja con la Dirección General de Educación concertada, al tiempo que prevé una respuesta social ante ese deterioro.
