Bruselas (EuroEFE).- El mercado europeo del acero se estancará en 2025 debido a la presión por los aranceles estadounidenses y la baja demanda y solo volverá a crecer en 2026 si se suavizan las tensiones comerciales y mejora la economía global, según las perspectivas publicadas este jueves por la patronal del sector Eurofer.
«La falta de una solución para el acero en las negociaciones comerciales entre la Unión Europea y Estados Unidos, la falta de predictibilidad de la situación geoeconómica global, y la persistente debilidad de la demanda frente a un exceso de capacidad global creciente están presionando al mercado europeo del acero», resumió la organización en un comunicado.
Sus últimas Proyecciones Económicas y para el Mercado del Acero reflejan que en 2025 el sector verá «otra recesión» tanto en el consumo aparten de este metal, que caerá un 0,2 % (menos del 0,9 % estimado en el segundo trimestre), como en los sectores que usan acero, dónde se reducirá un 0,7 % (dos décimas más de lo anticipado).
Eurofer retrasa así las previsiones de crecimiento hasta «al menos 2026», para cuando proyecta un repunte del consumo del 3,1 % y de los sectores usuarios de acero del 1,8 %.
🚨 #SteelMarket Q3 2025: 🇪🇺 steel stuck in long autumn 🍂
— European Steel (@EUROFER_eu) September 11, 2025
🔴 Recession again in 2025: apparent steel consumption -0.2%, steel-using sectors -0.7%, Q1 import share 25%
🟡 Weak manufacturing: automotive -4.2%, construction +0.4%
🟢 Uncertain rebound only in 2026
📰Press… pic.twitter.com/QM54Fof3m6
La organización es pesimista pese a que en el primer trimestre de 2025 el consumo de acero aumentó por segunda vez consecutiva (un 2,2 %, hasta los 33,8 millones de toneladas) puesto que la perspectiva sobre la demanda sigue siendo «muy incierta» y los niveles de consumo siguen «muy por debajo» de los niveles previos a la pandemia.
Las ventas domésticas también se incrementaron, en un 1,4 % tras haber caído un 2,0 % en los últimos tres meses de 2024, y las importaciones se redujeron «ligeramente», un 0,6 % frente al repunte del 6,3 % registrado en el último trimestre del año pasado.
Pero Eurofer advierte de que las importaciones de acero desde terceros países siguen en niveles «históricamente altos», en el 25 % este año según las previsiones, solo dos puntos porcentuales inferiores a las de 2024.
«La incapacidad para lograr un acuerdo sobre acero y la vaguedad de la declaración comercial conjunta de EE.UU. y la UE va en detrimento de nuestros productores, que siguen sujetos a un arancel del 50 % y de facto desconectados de su segundo mercado de exportación», dijo el director general de Eurofer, Axel Eggert, en un comunicado.
Las empresas europeas, añadió, temen que el desvío de «importaciones baratas» de acero hacia la UE lleve a más cierres de fábricas y despidos; así como a perder activos estratégicos en beneficios de sus competidores directos en EE.UU., Asia, el Norte de África y Oriente Medio.
El «último recurso» para atajar este problema, consideró, es la futura salvaguarda comercial que la Comisión Europea prevé presentar para reforzar la protección del sector acerero europeo ante la competencia de terceros que considera desleal.
Bruselas propondrá un nuevo instrumento comercial
La presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, reiteró este miércoles que propondrán un «nuevo instrumento comercial a largo plazo» para sustituir a la actual salvaguarda, que expira en 2026.
Esta impone ya un arancel del 25 % a las importaciones de acero que superen una cierta cuota por encima de los niveles históricos de comercio y Bruselas ha asegurado que adoptará medidas que sean más efectivas.
El acero y el aluminio quedaron fuera del acuerdo entre la UE y Estados Unidos por el que Washington impondrá aranceles de un máximo del 15 % a la mayoría de importaciones europeas, incluidos los coches, por lo que ambos metales siguen sometidos al arancel del 50 % que la Administración estadounidense aplica desde junio (tras haberlo elevado desde el 25 % inicial).
El texto se limita a llamar a una cooperación en este área, potencialmente a través de un sistema de aranceles y cuotas para el que no pone fecha.


