Moscú (EuroEFE).- La decisión de los líderes de la Unión Europea (UE) de financiar a Ucrania con emisión de deuda comunitaria y no con los activos rusos inmovilizados por las sanciones es una gran victoria del derecho y el sentido común, según el emisario económico del Kremlin, Kiril Dmítriev.
«Si esto es verdad, la cancelación del esquema ilegal inicialmente propuesto por la UE de usar las reservas internacionales rusas para financiar Ucrania se convertirá en una gran victoria del derecho y del sentido común«, escribió en X.
Dmitriev, director del Fondo de Inversiones Directas de Rusia y considerado como uno de los autores del plan de paz para Ucrania presentado por Trump, añadió que se trata en particular de una victoria de «las voces sensatas de Europa que defendían a la UE, al euro y a Euroclear».
Hungría con Eslovaquia y Chequia
Por su parte, el primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, se congratuló este viernes de que la República Checa se haya unido a Hungría y Eslovaquia en su negativa a participar en el préstamo para financiar a Ucrania acordado en el Consejo Europeo.
«Hemos liberado a nuestros hijos y nietos de la carga de este enorme préstamo de 90.000 millones de euros», afirmó Orbán en la red social Facebook desde Bruselas tras finalizar la cumbre de los Veintisiete.
El primer ministro aseguró que «la cooperación V3 se ha reanudado», en clara alusión al Grupo de Visegrádo (V4: Hungría, Eslovaquia, República Checa y Polonia) que en los últimos años había perdido de peso debido a las diferencias de las posturas en relación con la invasión rusa de Ucrania.
Si bien Polonia se mantiene firme en su fuerte apoyo militar y financiero a Ucrania, la República Checa ha dado un giro a su política hacia el país atacado por Rusia tras la reciente subida al poder del nuevo gobierno de populistas conservadores y euroescépticos que, encabezado por el magnate y exprimer ministro Andrej Babis, se formó tras las elecciones legislativas de octubre.
El Consejo Europeo celebrado ayer y hoy fue el primero al que Babis, cuyo partido ANO integra en el Parlamento el grupo ultraderechista ‘Patriotas por Europa’, al que también pertenece el Fidesz de Orbán, asistió desde que asumió su nuevo mandato.
Además de congratularse de que Praga se haya sumado a las ya conocidas posturas reacias a ayudar militarmente a Kiev que mantienen Budapest y Bratislava, Orbán manifestó también su satisfacción por el hecho de que el resto de los Veintisiete no haya logrado un acuerdo para recurrir ahora a utilizar los activos rusos congelados para financiar a Ucrania.
Crédito bélico
«La decisión significa que se ha logrado evitar el peligro inmediato de una guerra«, opinó el primer ministro magiar, quien había advertido que un eventual uso de los bienes de propiedad rusa podía desencadenar una guerra con Rusia.
No obstante, consideró que «la mala noticia» de la cumbre es que «los preparativos para la guerra continúan visiblemente» en la Unión Europea, al calificar el préstamo de «crédito bélico«.
Los líderes de la UE acordaron financiar a Ucrania con 90.000 millones de euros en 2026 y 2027 a través de la emisión de deuda a cargo del presupuesto comunitario, dejando de lado de momento el plan inicial de basarse para ello en los activos rusos inmovilizados por las sanciones.
Hungría, Eslovaquia y la República Checa han decidido mantenerse al margen y no verán afectadas sus obligaciones financieras en este préstamo.
El presidente del Consejo Europeo, António Costa dijo tras la cumbre que se concederá de forma urgente «un préstamo respaldado por el presupuesto de la Unión Europea», la cual «se reserva el derecho de utilizar los activos inmovilizados (rusos) para reembolsar este préstamo».


