Bruselas / Rabka Zdrój (Polonia) (EuroEFE).- El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sentenció este jueves que Polonia incumplió sus obligaciones comunitarias al desafiar la primacía del Derecho de la UE, y determinó que el Tribunal Constitucional polaco no es independiente ni imparcial, por irregularidades graves en el nombramiento de varios de sus miembros.
«El Tribunal Constitucional polaco no cumple las exigencias de independencia, imparcialidad y establecimiento previo por la ley, conforme al Derecho de la Unión», señaló el TJUE.
Así, la corte europea da la razón a la Comisión Europea (CE) «íntegramente» en su recurso. La reacción del Gobierno polaco fue pedir que se cumpla la sentencia, pero el Constitucional polaco (TK) rechazó el fallo y aseguró que no lo aplicará.
El caso se remonta a sentencias emitidas por el TK polaco el 14 de julio y el 7 de octubre de 2021, en las que dictaminaba que ciertas partes de los tratados de la UE eran «incompatibles con la Constitución polaca» y concluía que los tratados de la UE «no pueden anular la Constitución» del país en cuestión.
También calificaba expresamente la jurisprudencia del Tribunal de Justicia relativa al derecho a la tutela judicial efectiva de ultra vires, es decir, dictada fuera de las competencias que tiene atribuidas.
Violación del Derecho de la UE
Al considerar que esas sentencias violan diversos principios fundamentales del Derecho de la Unión, incluida su primacía, la CE interpuso un recurso por incumplimiento contra Polonia ante el Tribunal de Justicia, que ha estimado íntegramente el recurso del Ejecutivo comunitario.
El alto tribunal europeo concluye que Varsovia vulneró principios fundamentales del ordenamiento comunitario.
Según la sentencia, esas decisiones del Constitucional polaco quebrantaron «la primacía, la autonomía, la efectividad y la aplicación uniforme del Derecho de la Unión«, así como «el carácter vinculante de las resoluciones del Tribunal de Justicia», al impedir a las autoridades nacionales aplicar normas del Derecho comunitario, señaló en un comunicado el servicio de prensa del TJUE.
La corte europea, con sede en Luxemburgo, subraya que Polonia «no puede invocar su identidad constitucional para no respetar valores comunes consagrados en el artículo 2 del TUE (Tratado de la UE)», como el Estado de Derecho, la tutela judicial efectiva y la independencia judicial, ya que esos valores «constituyen el fundamento de la propia identidad de la Unión» a la que el país se adhirió voluntariamente.
La sentencia recalca además que los tribunales nacionales «no pueden determinar unilateralmente el alcance y los límites de las competencias atribuidas a la Unión» y que cualquier duda sobre la validez o interpretación del Derecho europeo solo puede resolverse «a través de un diálogo con el Tribunal de Justicia, mediante el procedimiento prejudicial».
Posibles sanciones a Polonia
En paralelo, el Tribunal de Justicia considera acreditadas «graves irregularidades» en el nombramiento de tres jueces del Tribunal Constitucional polaco en 2015 y de su presidenta en 2016, lo que impide considerar a ese órgano «un tribunal independiente e imparcial, establecido por la ley», tal y como exige el Derecho de la Unión.
El TJUE recordó que Polonia deberá ajustarse «con la mayor brevedad posible» a lo dictado en la sentencia, bajo riesgo de nuevas acciones y eventuales sanciones económicas si persiste el incumplimiento.
El Constitucional polaco insiste en que prima su ley
El Tribunal Constitucional de Polonia rechazó categóricamente la sentencia del TJUE, al asegurar en un comunicado que la corte europea está «fuera de sus competencias» y «no tiene ningún efecto» en el funcionamiento de los órganos constitucionales de Polonia, por lo que el fallo no se aplicará.
«El más alto cuerpo de Derecho en la República de Polonia es la Constitución y no las decisiones de órganos extranjeros«, se puede leer en el comunicado, que destacó que «no corresponde al TJUE evaluar la Constitución polaca».
El Gobierno polaco respalda al TJUE
Por su parte, el ministro de Justicia, Waldemar Żurek, se alineó con la sentencia del TJUE y afirmó que el TK polaco, que debería defender la Constitución, «no está funcionando correctamente«.
En un mensaje de vídeo publicado en internet, Żurek añadió que «la sentencia del TJUE nos obliga a actuar», por lo que, dijo, «debemos sentarnos todos en una misma mesa y considerar cómo reconstruir un Tribunal Constitucional que cumpla con la ley«.
Estas reacciones opuestas a la disputa entre Varsovia y Bruselas sobre la primacía legal y el Estado de derecho dentro del bloque comunitario ponen de relieve la división existente en Polonia entre el Gobierno de centro liberal de Donald Tusk y la oposición ultraconservadora de Ley y Justicia (PiS).


