GRAF2158. PADRÓN (A CORUÑA), 28/02/2023.- El consejero de Cultura de la Junta de Galicia, Román Rodríguez (2d), en la inauguración de la exposición 'Picasso Vivo. El legado picassiano de Camilo José Cela', que reúne cuadros, regalos y cartas originales que intercambiaron los creadores, este martes en la Fundación Camilo José Cela en Padrón (A Coruña). EFE/Lavandeira jr

Cela y Picasso: poemas de un pintor, ilustrados por un escritor

José Carlos Rodríguez


Padrón (A Coruña) .- La historia de amistad entre Camilo José Cela y Pablo Picasso está grabada en cada uno de los objetos, textos y dibujos que se dedicaron y que pueden verse en la exposición “Picasso vivo. El legado picassiano de Camilo José Cela”, que la fundación del Premio Nobel gallego ha inaugurado este martes en Padrón.


Más de 40 piezas ponen de manifiesto la intensa relación entre los dos genios -uno del arte, otro de la literatura- y el intercambio cultural que hubo entre ellos a finales de la década de los 50 y que se extendió hasta la muerte del pintor malagueño.


Fue un 31 de julio de 1958 cuando Camilo José Cela viajó a Cannes (Francia) con destino a la villa “La Californie”, sin cita previa, con la finalidad de ver a Picasso.


Animado por el también pintor Joan Miró, Cela quería plantearle a Picasso un proyecto de homenaje en la revista “Papeles de Son Armadans”, que el gallego dirigía en Palma de Mallorca.


Aunque sus primeros intentos por contactar con Picasso fueron infructuosos, fue finalmente David Douglas Duncan, el fotógrafo oficial de Picasso, el que ayudó a Cela a fijar una cita con el pintor, que tuvo lugar el 1 de agosto.


De ese encuentro, entre pintor y escritor, surgieron gran cantidad de colaboraciones, favorecidas tanto por la faceta pictórica de Cela como por el interés de Picasso por la poesía.


La cara sonriente que aparece en la portada de aquel número extraordinario de “Papeles de Son Armadans” fue el sello de una amistad que duraría varios años más. También la botella de anís “Machaquito” que se bebieron aquel 1 de agosto y que, al finalizar, Picasso le dedicó a Cela como recuerdo.

Papeles invertidos


Procedentes únicamente de los fondos de la Fundación Camilo José Cela, la exposición recorre la amistad entre ambos artistas a través de más de 40 piezas entre las que se hallan dibujos, grabados, textos, fotografías o diversos objetos que ambos se regalaron durante años.


En una de sus visitas a “La Californie”, Cela le propuso a Picasso la idea de elaborar una historia alrededor de los dibujos del pintor. Sin embargo, se invirtieron los papeles.


Poemas del pintor ilustrados por el escritor que desembocan en la publicación de “Poemas y escritos”, en 1960, a la que sigue “Gavilla de fábulas sin amor”, en 1962, esta vez sin invertir los papeles.


Comisariada por Lourdes Regueiro, coordinadora de actividades culturales de la Fundación Camilo José Cela, junto a Iván Rodríguez, la muestra de textos y dibujos y ese intercambio entre estos dos genios del arte y la literatura podrá visitarse a partir de hoy y hasta el 31 de mayo, con motivo del 50 aniversario de la muerte Picasso.

Picasso y A Coruña


Durante la inauguración, el conselleiro de Cultura, Educación, FP y Universidades, Román Rodríguez, ha señalado que Pablo Picasso es “uno de los más grandes creadores de la historia de España del siglo XX” y que, además, tenía cierto carácter “gallego” debido no solo a su relación con Cela sino, también a su relación con la ciudad de A Coruña.


Según el conselleiro, tanto Cela como Picasso eran “dos genios” y también “muy gallegos”: “Cela por razones obvias, pero Picasso, que nació en Málaga, era tremendamente gallego porque vivió parte infancia en A Coruña”, ha explicado Rodríguez.


De hecho, la ciudad herculina inaugurará el próximo 23 de marzo su propia exposición sobre Picasso, titulada “Picasso, branco no recordo azul”, que reivindicará en el Museo de Bellas Artes de la ciudad la huella gallega del pintor a través de una selección de 120 piezas. EFE

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