Santiago de Compostela, (EFE).- Versos grabados en piedra para llegar al alma de Olga Novo, Laura Pugno y Moon Chung-hee lucen desde este viernes en el Xardín das pedras que falan, situado tras el rectorado y la biblioteca de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), a escasos metros de la catedral.

El jardín de Fonseca es un espacio que antaño acogió el jardín botánico ligado a la Facultad de Farmacia para cultivar plantas medicinales con las que curar el cuerpo y que desde hace unos años es el emplazamiento de una espiral de piedras con mensaje que sirven como “herramientas para curar el alma”, ha destacado el rector de la USC, Antonio López.
O Xardín da Pedras que Falan es una iniciativa del Ayuntamiento de Santiago, ideada por el escritor Suso de Toro -que no ha podido estar presente este viernes- y dirigida por el poeta Claudio Rodríguez Fer, director de la cátedra José Ángel Valente de la USC.
Valente es, precisamente, uno de los quince autores -con las tres incorporaciones hechas en esta jornada- que cuenta ya con sus versos grabados en piedra en este jardín.
Lenguas y autores diversos
El proyecto consiste en una espiral de piedras grabadas -diseñadas por Pepe Barro- con versos inéditos y fragmentos literarios de autores y autoras de procedencias y lenguas diversas.
La piedra inaugural le correspondió a Rosalía de Castro, a la que le siguió otra de Seamus Heaney, así como otras de Luz Pozo Garza, Adonis, Valle-Inclán, Kerstin Hensel, Marta Pesarrodona, Antonio Gamoneda o Bernardo Atxaga, entre otros.
También cuenta con una piedra en el jardín Salvador García Bodaño, poeta fallecido el pasado día 7 de marzo, que dejó escrito: “Compostela, sueño de piedra en el tiempo”.
Versos grabados en piedra para la eternidad
Y así se ha referido también la autora italiana Laura Pugno (Roma, 1970) a su verso grabado en piedra en la ciudad del apóstol, ya que será “la parte más duradera” de su obra, ya que “la piedra dura más que el papel o el píxel”.
“Aflora, palabra, como un pedazo de hueso; un pensamiento entre la mente y la hierba”, se lee en la piedra que forma parte de la espiral y que “quizá, cuando todo se haya convertido de nuevo en bosque, alguien dará con ella y leerá unas palabras en un idioma que quizá no entienda”.
“Los versos, las imágenes y la cultura serán lo que quede de nosotros una vez que nos hayamos ido”.
Laura Pugno
Para la poeta lucense Olga Novo (A Pobra de Brollón, 1975), premio Nacional de Poesía en 2020 por Feliz Idade, tener espacio en este jardín junto a escritores que admira y ama tiene un significado “muy profundo”.
“La última vanguardia es el amor”, ha escrito Novo para esta piedra que la conecta con autores como Eugenio Granell, cuya fundación está en la capital gallega, y cuya divisa era “poesía, amor y libertad”.
Novo ha hecho un alegato a la cultura, con un recuerdo a la tierra, a sus antepasados analfabetos y subalternos, porque la cultura “no conoce barreras ni fronteras; no hay alta ni baja cultura”, ha dicho, “sino que cultura viene de cultivar y cultivar remite directamente a la tierra”.
La otra autora que desde este viernes cuenta con sus versos inéditos grabados en piedra en su lengua es la surcoreana Moon Chung-hee (Posong, 1947), que no ha estado presente.
La concejal de Cultura de Santiago, Mercedes Rosón, ha explicado que han elegido marzo para la colocación de las piedras dedicadas a la obra de tres mujeres por ser el mes en el que se conmemora el Día de la Mujer.
Además de Rosón han acudido otros representantes municipales, encabezados por el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo, y también los concejales Jorge Duarte y Branca Novoneyra.