Rebeca Palacios|
Herce (La Rioja), (EFE).- El candidato socialista a la Alcaldía de Herce (La Rioja), Jesús Ibáñez, ha dicho a EFE que afronta su décima campaña electoral “con la misma ilusión” que la primera, en 1987, aunque a sus 62 años reconoce que si revalida el cargo, el próximo sería su último mandato.
Ibáñez (Herce, 1960) ha cumplido 40 años en el Consistorio de su pueblo, donde se incorporó en 1983 como concejal independiente en su primera legislatura y, desde entonces, le queda la satisfacción de haber visto la transformación de su municipio, que cuenta actualmente con 340 vecinos.
Reconoce que la vida política le ha quitado “mucho tiempo para su familia”, especialmente para su hija, que tiene ahora 17 años, mientras que su mujer “lo tiene asumido” porque ya le conoció como alcalde, pero asegura no se arrepiente de la dedicación a su pueblo y todo compensa al recibir el “cariño” de sus vecinos.
Durante su etapa como edil y regidor compaginó las tareas municipales con su trabajo en una carpintería metálica junto a su hermano, pero cuando este se jubiló, decidieron cerrar el negocio y, desde hace año y medio, Ibáñez trabaja liberado a media jornada en el Ayuntamiento.
“Cuando empecé con 21 años como concejal tenía toda la ilusión del mundo por trabajar por mi pueblo. Ya de alcalde, con 25, tenía la idea de estar un par de mandatos, pero esto te engancha y siempre quedan cosas por hacer”, ha reflexionado.
En cualquier momento del día
“Ahora tenemos un pueblo con una calidad de vida impresionante”, ha asegurado.
Así, presume con orgullo de todos los proyectos urbanísticos desarrollados durante sus mandatos, desde la construcción del edificio del Ayuntamiento a la cobertura de la yasa en la que se vertía la basura, sobre la que se ha instalado un parque.
También ha citado el impulso de 24 viviendas en régimen de cooperativa, la ampliación de las escuelas, en las que actualmente hay 14 niños escolarizados; la pavimentación de muchas calles, el frontón municipal y, especialmente, las piscinas municipales.
Precisamente la obra de las piscinas fue uno de los “peores momentos” de su vida política, ya que su sobrecoste presupuestario provocó en 2006 una denuncia judicial por parte del PP, que finalmente fue archivada, aunque ha matizado que en todo momento estuvo tranquilo porque sabía que las cosas estaban bien hechas.
Acostumbrado a recibir a sus vecinos “en cualquier momento del día”, responde a la entrevista mientras atiende a los operarios que se encargan de solucionar una fuga de agua por el reventón de una tubería.
Con 7 concejales en el Ayuntamiento de Herce (4 del PSOE y 3 del PP en esta legislatura), ha habido mandatos con distribución de 4-3 ediles y otras de 5-2, aunque siempre ha logrado mayoría y no ha tenido que “pactar” con otros grupos políticos.
Por ello, para él supone “una satisfacción tremenda” que la gente de su pueblo le siga apoyando y le anime “a continuar tirando hacia adelante”.
