La directora de la Oficina del Parlamento Europeo en España, María Andrés durante su intervención en el acto organizado por el colegio Alcaste, una de las escuela embajadoras de la Eurocámara, este lunes en Logroño. -EFE/ Raquel Manzanares

La Oficina del Parlamento Europeo en España aboga por hacer pedagogía sobre la UE

Eduardo Palacios|
Logroño (EFE).- Las instituciones europeas tienen un diseño y un funcionamiento complejo, pero los ciudadanos deben conocerlas lo mejor posible porque muchas de las decisiones que se toman en Bruselas les afectan de forma directa y, por eso, es necesario hacer pedagogía sobre la UE a todos los niveles.

Así lo ha considerado, en declaraciones a EFE, la directora de la Oficina del Parlamento Europeo en España, María Andrés, quien ha participado en Logroño en un acto organizado por el colegio Alcaste, una de las escuela embajadoras de la Eurocámara.

Los estudios que la Eurocámara realiza por toda la UE “dicen que España es un país muy europeista”, ha afirmado, “pero también nos muestran que hay poco conocimiento de las instituciones europeas y de su funcionamiento”.

De ahí que un objetivo de la UE sea realizar acciones informativas por todo el continente, no solo para dar a conocer el funcionamiento de las instituciones, “sino para explicar qué deberes y qué derechos se tienen por ser ciudadanos europeos”, algo que puede ayudar a “reforzar el sentimiento de ser europeo”.

La riojana María Andrés ha admitido que “el funcionamiento de las instituciones europeas es complejo”, pero “sí creemos que los ciudadanos, aunque no sepan bien cómo funciona la UE, son conscientes de que en Europa se deciden cosas importantes para ellos”.

“Algo similar pasa, en general, con el Congreso de los Diputados, porque la gente, en general, no conoce cómo funciona” y “desconoce, por ejemplo, que una gran parte del trabajo de la Cámara Baja es trasponer la normativa europea a las leyes españolas”, ha subrayado.

“En general, vivimos en un continente en el que hay un reparto de funciones en la gestión desde las instituciones más cercanas a Europa, pero todo afecta a los ciudadanos, que deben ser conscientes del papel de las instituciones comunitarias”, ha considerado.

Los ciudadanos europeos son maduros

Pero otro “reto” de la UE en esa misión, ha reconocido, es que “las instituciones europeas nos parecen algo lejano” y, “por ejemplo, en el Parlamento Europeo apenas se conoce a quienes representan a los ciudadanos, como mucho a los de su país”.

La necesidad de conocer mejor las instituciones europeas también tiene que ver con cómo afrontan los ciudadanos el “juego peligroso” al que, en ocasiones, se somete a los habitantes de cada país, que es “el de capitalizar los éxitos como algo propio de cada territorio y dejar las decisiones difíciles a Europa”.

“Es algo peligroso porque fomenta el distanciamiento de los ciudadanos respecto a Europa, a pesar de que la realidad es que siempre que hay una crisis, de cualquier orden, las respuestas se deben coordinar desde la UE”, como ya se ha demostrado en los últimos años, ha explicado, en alusión a situaciones como la que se ocasionó por la covid y por la guerra en Ucrania.

Por eso, ha pedido a los políticos de todos los países “más honestidad” y no que favorezcan el distanciamiento con Europa, “como ocurrió en Gran Bretaña”.

Además, ha insistido, “los ciudadanos europeos no son niños, no hay que tratarles como si no fueran maduros” porque “son conscientes de cuándo hay que tomar decisiones duras y difíciles” desde la UE.

Los fondos de cohesión continuarán

La contribución de Europa a la economía española es mucho más importante que la contribución extraordinaria que suponen los fondos de recuperación aprobados tras la pandemia, que, según está previsto, concluirán en 2026, aunque son independientes de los fondos de cohesión, que ” llegan a España desde 1986 y que van a continuar”, lo mismo que los de la política agrícola, ha afirmado.

España no es todavía un país “contribuyente neto” a la UE, “pero llegará un momento en el que sí aporte más de lo que recibe”, ha dicho, y “eso será una buena noticia” por la evolución de la economía “y también será un signo de madurez”.

Mientras eso sucede, “continuarán llegando a España esos fondos transversales” para la cohesión, junto a los del programa extraordinario, “en el que este país no se puede quejar porque es, junto a Italia, el que más recibe” y, además, “a pesar del ruido que a veces hay, se están ejecutando bien, a velocidad de crucero”.

Ha recordado que en 2024 se convocarán elecciones al Parlamento Europeo y “los ciudadanos deben ser conscientes de su importancia” y no deben pensar que “son unos comicios de segundo orden, ni ir a ellas en clave nacional o por castigar a un partido determinado”, ya que “nos jugamos mucho en esas elecciones”, ha concluido.