Representantes de una veintena de organizaciones y entidades sociales han protagonizado una marcha a pie desde el Parque Picos de Urbión hasta la prisión de Logroño para reclamar al Ayuntamiento un transporte público al centro penitenciario. EFE/Raquel Manzanares

Una marcha en Logroño visibiliza la necesidad de un transporte público a la cárcel

Logroño (EFE).- Representantes de una veintena de organizaciones y entidades sociales han protagonizado este sábado una marcha a pie desde el Parque Picos de Urbión hasta la prisión de Logroño para reclamar al Ayuntamiento un transporte público al centro penitenciario.


Entre los colectivos participantes en esta marcha, está Cáritas, uno de cuyos técnicos, Marcos Montoya, en declaraciones a los periodistas, ha explicado que esta petición es “histórica” desde el año 2008.


La prisión de Logroño, ha explicado, es “una Administración aleada de la ciudad” -a una distancia de unos 5,5 kilómetros a pie desde el centro de la ciudad- y hay personas en situación de permiso de salida, tercer grado y condicional y sus familiares que precisan del derecho del transporte público al centro.


La inexistencia de transporte público también afecta a las personas condenadas a trabajos en beneficio de la comunidad y penas alternativas, así como a los participantes de asociaciones que desarrolla sus actividades en el centro penitenciario, ha informado.


Algunas de estas personas, ha subrayado, no pueden acceder con vehículo propio, en unos casos por cuestiones económicas o por discapacidad, es preciso un transporte público desde la ciudad a la cárcel.


Estos colectivos piden al Ayuntamiento que el acceso a la cárcel con garantías, a través de un transporte público, lo que transmitirán al equipo de Gobierno Municipal, con el que tienen prevista una próxima reunión, ha afirmado.


A la llegada a pie a la prisión de Logroño, se ha leído un manifiesto, suscrito por los colectivos convocantes en el que se ha subrayado que esta petición de transporte público a la cárcel está fundamentada en la dignidad de las personas presas a recibir este servicio.