Imagen de archivo de Bola Ahmed Tinubu .EFE/Akintunde Akinleye

El oficialista Tinubu gana las polémicas elecciones presidenciales de Nigeria

Lagos (EFE).- El candidato del gobernante Congreso de Todos los Progresistas (APC), Bola Ahmed Tinubu, ganó las polémicas elecciones presidenciales nigerianas celebradas el pasado 25 de febrero.

Según ha confirmado este miércoles la Comisión Electoral Nacional Independiente (INEC), Tinubu, de 70 años, obtuvo el 36 % del sufragio (8,79 millones de votos).

“Tinubu, Bola Ahmed, del APC, habiendo cumplido con los requisitos de la ley, por la presente es declarado ganador”, ha dicho el presidente del organismo al anunciar los resultados, después de que los principales partidos opositores pidieran ayer cancelar y repetir los comicios.

Atiku Abubakar, el candidato de la principal fuerza opositora, el Partido Democrático de los Pueblos (PDP), quedó en segunda posición con el 29 % de los votos (6,98 millones).

El tercer lugar lo ocupó Peter Obi, del Partido Laborista (LP), que cosechó el 25 % los votos (6,1 millones).

Dieciocho candidatos participaban en esta carrera presidencial, pero las encuestas señalaron que sólo esos tres candidatos tenían opciones de ganar.

Lagos, 1 mar (EFE).- Bola Ahmed Tinubu, vencedor de los polémicos comicios presidenciales de Nigeria del pasado 25 de febrero y candidato del gobernante Congreso de Todos los Progresistas (APC), celebró hoy su triunfo electoral e hizo un llamamiento a la paz y la unidad después de que la oposición cuestionase las elecciones.
"Ustedes han decidido depositar su confianza en la visión democrática de una Nigeria basada en la prosperidad compartida y alimentada por los ideales de unidad, justicia, paz y tolerancia", afirmó Tinubu en un discurso desde la sede de su partido en Abuya, la capital nigeriana.
"Felicitamos a la Comisión Electoral Nacional Independiente (INEC). Los errores que ocurrieron fueron relativamente escasos en número e irrelevantes para el resultado final", añadió el nuevo presidente electo, rechazando así las voces de los opositores que acusaban a la INEC de fraude después de que la transmisión electrónica de los resultados de las mesas electorales no se pudiera llevar a cabo de manera completa.
Era la primera vez que Nigeria usaba en unas elecciones generales esa tecnología, adoptada para impedir posibles irregularidades.
Este martes, mientras la INEC aún publicaba los resultados electorales parciales después de varios retrasos, los principales partidos de la oposición en Nigeria ya pidieron cancelar y repetir los comicios.
"Sé que a algunos candidatos les resultará difícil aceptar los resultados electorales. Están en su derecho de buscar un recurso legal. Lo que no es correcto ni defendible es que se recurra a la violencia", señaló el presidente electo.
"Cualquier impugnación del resultado electoral debe hacerse en un tribunal de justicia y no en las calles", añadió.
De esta manera, el candidato del partido gubernamental pidió calma a todos sus compatriotas, incluidos sus simpatizantes. 
Tinubu aseguró que será un "líder justo" para todos los nigerianos, y que permanecerá "en sintonía con sus aspiraciones" para crear con "sus talentos" una "nación de la que podemos estar orgullosos".
Tinubu, de 70 años, obtuvo el 36 % de los votos (8,79 millones), según anunció hoy el presidente de la INEC, Mahmud Yakubu. 
Atiku Abubakar, el candidato de la principal fuerza opositora, el Partido Democrático de los Pueblos (PDP), quedó en segunda posición con el 29 % de los votos (6,98 millones).
El tercer lugar lo ocupó Peter Obi, del Partido Laborista (LP), que cosechó el 25 % de los votos (6,1 millones).
Dieciocho candidatos participaban en esta carrera presidencial, pero las encuestas señalaron que sólo esos tres candidatos tenían opciones de ganar.
Además de obtener el mayor número de votos, Tinubu también consiguió más de una cuarta parte de los sufragios emitidos en al menos dos tercios de los 36 estados nigerianos, requisitos que las leyes electorales nigerianas exigen a los candidatos que compiten por la Presidencia para ser declarados ganadores.
Así, Tinubu sucederá al presidente saliente y compañero de partido Muhammadu Buhari, en el poder desde 2015, quien no buscó la reelección tras agotar el segundo mandato consecutivo de cuatro años permitido por la Constitución.
Buhari celebró los resultados electorales como una demostración de la "madurez democrática" de su país.
"Nunca un mapa electoral había cambiado tan drásticamente en un ciclo. (...) Esto sucede en las elecciones competitivas. Los votos no pueden darse por sentados. Cada uno debe ser ganado", subrayó el mandatario saliente, que también insistió en que cualquier disputa se dirima ante los tribunales.
"En una región que ha sufrido recaídas y golpes militares en los últimos años, estas elecciones demuestran la continua relevancia y capacidad de la democracia para cumplir con las personas a las que sirve", añadió Buhari.
El presidente electo heredará una nación asolada por una inseguridad creciente en algunas partes del país, con ataques constantes de bandas criminales que secuestran a civiles para exigir lucrativos rescates, grupos yihadistas y rebeldes independentistas.
También deberá hacer frente a la devaluación de la moneda local (naira), una inflación galopante y el elevado desempleo, pese a que Nigeria destaca como el principal productor de petróleo de África y la economía más grande del continente.
Un vendedor ofrece periodicos en Lagos con información sobre las recientes elecciones celebradas en Nigeria. EFE/EPA/Akintunde Akinleye

Tinubu pide paz y unidad tras ganar las elecciones en Nigeria

Al conocer el anuncio de la Comisión Electoral, Tinubu, ha celebrado su triunfo y ha hecho un llamamiento a la paz y la unidad.

“Ustedes han decidido depositar su confianza en la visión democrática de una Nigeria basada en la prosperidad compartida y alimentada por los ideales de unidad, justicia, paz y tolerancia”, afirmó Tinubu en un discurso desde la sede de su partido en Abuya, la capital nigeriana.

“Felicitamos a la Comisión Electoral Nacional Independiente (INEC). Los errores que ocurrieron fueron relativamente escasos en número e irrelevantes para el resultado final”, añadió el nuevo presidente electo, rechazando así las voces de los opositores que acusaban a la INEC de fraude después de que la transmisión electrónica de los resultados de las mesas electorales no se pudiera llevar a cabo de manera completa.

Era la primera vez que Nigeria usaba en unas elecciones generales esa tecnología, adoptada para impedir posibles irregularidades.

“Sé que a algunos candidatos les resultará difícil aceptar los resultados electorales. Están en su derecho de buscar un recurso legal. Lo que no es correcto ni defendible es que se recurra a la violencia”, señaló el presidente electo.

“Cualquier impugnación del resultado electoral debe hacerse en un tribunal de justicia y no en las calles”, añadió.

El problema de la seguridad y la crisis económica

El presidente electo heredará una nación asolada por una inseguridad creciente en algunas partes del país, con ataques constantes de bandas criminales que secuestran a civiles para exigir lucrativos rescates, grupos yihadistas y rebeldes independentistas.

También deberá hacer frente a la devaluación de la moneda local (naira), una inflación galopante y el elevado desempleo, pese a que Nigeria destaca como el principal productor de petróleo de África y la economía más grande del continente.