Berlín (EFE).- La policía continúa la investigación del tiroteo registrado la noche del jueves en un centro de los testigos de Jehová en Hamburgo, que causó 8 muertos entre ellos el atacante, quien se quitó la vida al llegar la policía.
Según han informado las autoridades en una rueda de prensa, el agresor usó para la matanza una pistola para la que disponía de permiso de armas.
“El perpetrador huyó a la primera planta del edificio y allí se suicidó, por lo que hablamos en total de ocho muertos”, dijo el concejal de Interior de Hamburgo, Andy Grote.
Cuando los agentes entraron al inmueble en el que se registró el tiroteo, que era utilizado por testigos de Jehóva, vieron de inmediato cómo un individuo con un arma de fuego huía al piso superior, confirmó el director del operativo policial, Mathias Tresp.
A continuación, encontraron “a un hombre sin vida con un herida letal y con un arma de fuego al lado”, señaló Tresp, quien enfatizó que la rápida actuación de la policía logró “aislar” al atacante de sus víctimas y evitó que se produjeran más muertos.
Los representantes de la Fiscalía y de la Oficina de Investigación Criminal de la policía señalaron por su parte que el atacante, que ha sido identificado como Philipp F., de nacionalidad alemana, no contaba con antecedentes penales de ningún tipo y poseía un permiso de armas como tirador deportivo.

La motivación del ataque, aun por esclarecer
Para el crimen empleó la pistola que estaba registrada a su nombre y en su vivienda han sido halladas múltiples cajas con municiones.
Además la policía ha confiscado dispositivos electrónicos que todavía están siendo investigados.
Aunque la motivación del ataque todavía está por esclarecer, no hay indicios de que haya un trasfondo político, sino que las autoridades apuntaron más bien a una posible disputa personal, a pesar de que no entraron en detalles.
Philipp P. había sido testigo de Jehová pero abandonó la comunidad religiosa hace aproximadamente un año y medio, “de forma voluntaria pero no de buenas maneras”, según el portavoz de la Oficina de Investigación Criminal, Thomas Radzuweit, aunque sobre las circunstancias de su partida las informaciones por el momento son contradictorias.
Las siete víctimas mortales del ataque son cuatro hombres y dos mujeres, de entre 33 y 60 años y todos ellos de nacionalidad alemana, así como una criatura nonata de siete meses de gestación. Ninguno de ellos eran parientes del atacante.
Ocho personas resultaron heridas y cuatro de ellas permanecen de momento en estado grave. Seis poseen nacionalidad alemana, ptra es una mujer ugandesa y una ucraniana.

Policías germanos inspeccionaban el interior de la iglesia de los Testigos de Jehová de Hamburgo en la que anoche se registró un tiroteo. EFE/EPA/NEWS5
Los hechos ocurrieron sobre las 21:00 horas de la noche del jueves cuando una cincuentena de testigos de Jehová se hallaban reunidos celebrando un oficio religioso.
El edificio de tres plantas se encuentra en la calle Deelböge y medios locales informaron de que en el Salón del Reino los miembros de los Testigos de Jehová se reúnen dos veces a la semana.
El alcalde de Hamburgo, Peter Tschentscher, calificó de "horroroso" lo ocurrido en la ciudad y declaró que "las fuerzas de seguridad trabajan intensamente en la aclaración de lo sucedido".