Más de 100.000 personas se juntaron hoy en Jerusalén para protestar contra la reforma judicial del Gobierno de Benjamín Netanyahu, que se vio forzado a congelar su polémico plan tras el pulso echado por la masiva ola de protestas. EFE / Joan Mas Autonell

Noche de incidentes en Israel tras parar Netanyahu su reforma judicial

Jerusalén (EFE).- La intensa jornada de protestas de ayer en contra y a favor de la reforma judicial en Israel acabó por la noche con choques entre Policía y manifestantes anti-reforma en Tel Aviv.

También hubo incidentes con grupos ultraderechistas favorables al Gobierno, que agredieron a transeúntes árabes en Jerusalén.

En la Ciudad Santa, aficionados de extrema derecha del club de fútbol Beitar Jerusalén quemaron contenedores y bloquearon una carretera cerca de una manifestación derechista a favor de la reforma judicial del Gobierno, que el primer ministro se ha visto forzado a congelar por las protestas.

Hasta última hora del lunes, manifestantes opuestos al plan del Gobierno de Netanyahu siguieron protestando en distintos puntos de Israel.

En Tel Aviv, intentaron bloquear la autopista Ayalon mientras la Policía antidisturbios trataba de evitarlo.

En Jerusalén, al menos 100.000 israelíes rodearon el Parlamento para presionar a Netanyahu a que parara su polémico plan.

Por la tarde, tras una larga jornada de reuniones y fricciones con los socios de su propio Gobierno -especialmente con los miembros de extrema derecha-, el primer ministro anunciaba la paralización temporal de la reforma y emplazaba a negociar un compromiso de consenso en torno a esta cuestión con la oposición.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu (C), en una sesión de votación en la Knesset, el parlamento israelí, este pasado lunes, 27 de marzo
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu (C), en una sesión de votación en la Knesset, el parlamento israelí, este pasado lunes, 27 de marzo. EFE/EPA/Abir Sultan

Herzog habla con Netanyahu y con la oposición

El presidente de Israel, Isaac Herzog, habló anoche con Netanyahu, con el líder de la oposición, el centrista Yair Lapid, y el líder del partido opositor Unidad Nacional, Beny Gantz, para iniciar “un proceso de diálogo inmediato” en torno a la reforma judicial.

Tras las masivas protestas de ayer, el presidente israelí -quién había ofrecido su mediación semanas atrás- llamó al primer ministro y a los líderes opositores con el objetivo de buscar formas de empezar conversaciones “con el auspicio de la oficina de presidencia”, según informó un portavoz en un comunicado.

Herzog pidió que todas las partes “nombren equipos de trabajo” para las negociaciones, y dijo querer incluir en este proceso a miembros de los distintos partidos políticos con representación parlamentaria, a miembros de la sociedad civil y a “otras partes interesadas” para que “presenten sus distintas posiciones e ideas”.

Los detractores del polémico plan de reforma, que daría mayores poderes del Gobierno sobre la Justicia, consideran que este acabaría con la independencia del poder judicial y la separación de poderes en Israel.

Desde que comenzó su tramitación, se ha agravado la ya acentuada polarización de la población israelí y ha derivado en las protestas más masivas de las últimas décadas en Israel.