La jefa del departamento de conservación y restauración del Museo Bellas Artes de Bilbao, María José Ruiz-Ozaita, (i) explica la intervención en una de las obras restauradas en 2022. EFE/Luis Tejido

El Bellas Artes Bilbao restaura obras de Badiola, Sistiaga y Anglada Camarasa

Bilbao mar (EFE).- El Museo de Bellas Artes de Bilbao ha restaurado en 2022 obras singulares en la trayectoria de artistas como Txomin Badiola (Bilbao,1957), José Antonio Sistiaga, Anglada Camarasa y Julio González, pertenecientes a su colección propia y a una reciente donación del artista bilbaíno.


Tras la restauración, llevada a cabo con el mecenazgo de la Fundación Iberdrola, uno de los patronos principales de la centenaria pinacoteca bilbaína, una selección de ellas permanecerán expuestas al público en las salas clásicas del Museo.


De Anglada Camarasa (Barcelona, 1871-Pollença-Mallorca, 1959), se ha restaurado la obra “Desnudo bajo la parra”, de 1910, adquirida por la Diputación de Vizcaya en la primera Exposición Internacional de Pintura y Escultura de Bilbao de 1919, y que ya fue objeto en el Bellas Artes de una primera restauración en 1977.


Del también catalán Julio González (Barcelona, 1876-Arcueil-Francia, 1942) se han restaurado cinco dibujos de campesinas y otras figuras femeninas, que forman parte de la amplia colección de obra sobre papel que el museo bilbaíno posee de este artista.


Del pintor guipuzcoano José Antonio Sistiaga (San Sebastián, 1932), se ha recuperado la luminosidad y viveza de la pintura de su colorista óleo “Acción Vital. Homenaje a nuestros antepasados” (1970), adquirido por el Bellas Artes en 1979, en los primeros años de la transición cuando el centro expositivo inició la compra de obras singulares de artistas vascos tanto consolidados como que iniciaban su carrera profesional.

Importante donación de Badiola


De esta época es también el tablero “Sin título” del bilbaíno Txomin Badiola (adquirido en 1979, cuando aún cursaba sus estudios de Bellas Artes en la Facultad del mismo nombre de la UPV/EHU) y la escultura “Cuadro sólido nº 2” (1981), formada por 10 tableros de madera de chopo, 8 de los cuales estaban pintados con pintura al aceite, que ha sido sustituida por pintura al agua, más respetuosa con el medio ambiente.

El artista Txomin Badiola, ante su obra “Arquitecturas”, donada al Museo de Bellas Artes de Bilbao en 2022. EFE/Luis Tejido


Junto a estas dos piezas, el Museo bilbaíno ha procedido a la restauración de otras dos esculturas. “Serie negra nº5” (1981) y “Sin título” (1979) donadas por el artista bilbaíno junto a otras dos pìezas de madera “Arquitecturas” (1981″ y “Serie negra nº8” (1981) y 18 dibujos, donadas todas ellas por Badiola con motivo de la restauración de “Cuadro sólido nº2” , según ha explicado este lunes el propio artista.

Obras sobrevivientes


Badiola ha revelado que las 22 piezas donadas, todas ellas de la misma época que la adquirida por el Museo Bilbao hace ya más de 40 años, las tenía almacenadas en un local que sufrió una inundación a la que sobrevivieron.


Ha explicado que estas piezas corresponden con un momento “muy importante” no sólo en su trayectoria, cuando estaba en cuarto de carrera, sino también en la trayectoria del arte vasco cuando artistas que estudiaron con él en la UPV/EHU, como Dario Urzaiz, Juan Luis Moraza y Luisa Fernández, entre otros, generaron un arte que era “reacción” a la tradición de la escultura vasca de la época.


“Era una tradición muy ligada al manejo de ciertos materiales y a un cierto carácter mítico y nuestra generación lo que hace es reaccionar a esta situación y lo hace instalándose en un debate más serio, se podría decir; era un momento en que lo importante era que el arte hablara sobre sí mismo”.


“Y en ese ambiente podíamos convivir perfectamente artistas como Dario Urzaiz y yo, porque aunque trabajásemos sobre planteamientos diferentes, el fondo era el mismo”, ha concluido. EFE