San Sebastián, 12 nov.(EFE).- Chakib Lachgar y Laura Rodríguez ganan la Behobia-San Sebastián en su 58 edición con récord de la prueba para el español de origen marroquí.

El ganador de la última edición de 2022, Nan Oliveras atacó nada más darse la salida. Se escapó de inicio de la marca del favorito Lachgar, que parecía controlarle a una distancia siempre amortizable, toda una novedad en esta clásica en la que es costumbre correr en grupo los primeros kilómetros.
Chakib Lachgar sorprende a Oliveras
Lachgar, recientemente proclamado campeón mundial en 50 kilómetros ruta en India, se uniría al triatleta catalán a los diez minutos de carrera y se conformó a las primeras de cambio un dúo favorito que parecía tenerlo todo para disputarse el triunfo en una meta todavía muy alejada de su posición.
El corredor no quería compañía y en el minuto 26, en la bajada de Gaintxurizketa, incrementó el ritmo. Sorprendentemente Nan Oliveras no pudo seguirlo, con lo que especialista en carreras largas inscrito a última hora para esta clásica se quedaría solo en cabeza.
En un estado de forma espectacular, Lachgar ya no tendría rival. Nan Oliveras pagaba el esfuerzo de su ataque descontrolado de salida y solo el marroquí Zakariya El Boubekraouia aguantaba el tipo a una prudente distancia.

A partir de aquí Chakib tendría como único rival en los últimos kilómetros al cronómetro, convencido en rebajar el récord de la carrera no decrecería su ritmo para marcar en meta un tiempo estelar por debajo del minuto.
Laura Rodríguez ganadora
Mientras, Sara García sería la encargada de marcar el ritmo en la prueba femenina.
En esta ocasión la carrera femenina salió unos minutos antes que la masculina y mantuvo un nutrido grupo de atletas durante buena parte de los 20 kilómetros de recorrido.
Pilar Fernández, Laura Rodríguez, Elena Alberdi y Sara Villasante cogerían el testigo a la corredora palentina y se hicieron fuertes en el grupo. De este conjunto se había apeado Sara García cuando pasaron Errenteria, ya a las puertas de la capital donostiarra.
Finalmente Laura Rodríguez apretó, solo le siguió y con apuros una Sara Villasante que tuvo que ceder en su esfuerzo con la meta a la vista para que la cántabra alzara los brazos en solitario en el Boulevard de San Sebastián.