Oviedo (EFE).- El pleno del parlamento asturiano ha rechazado hoy una iniciativa de Foro que solicitaba el cese de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, por la polémica con el error que generó un retraso de varios años en la construcción de los trenes con los que estaba previsto renovar la flota de los servicios ferroviarias de cercanías en Asturias y Cantabria.
La moción pedía además que se implementasen los mecanismos para evitar errores de ese tipo, incluida una auditoría, así como abrir la negociación entre el Principado y el Gobierno central para el traspaso de las competencias de los ferrocarriles cuyo itinerario se desarrolle íntegramente en Asturias garantizando previamente la puesta a punto de las infraestructuras ferroviarias y del material rodante, y una financiación adecuada que asegure el mantenimiento óptimo de las cercanías.
La iniciativa ha contado con el respaldo de Foro y Podemos mientras PSOE e IU han votado en contra y PP, Ciudadanos, Vox y el único diputado del Grupo Mixto han optado por la abstención, justificada en el caso de los populares por la imposibilidad de que la moción se votase por puntos al haber pedido el voto telemático – que impide esa posibilidad- su ex presidenta, Teresa Mallada.
Según el portavoz de Foro, Adrián Pumares, su partido no puede darse por satisfecho con las dimisiones del presidente de Renfe y de la secretaria de Estado de Infraestructuras dado que debe ser la ministra quien asuma la responsabilidad de una mala gestión de la que, además, “no se han dado las explicaciones necesarias”.
Para Pumares, los usuarios del ancho métrico en Asturias, que llega a Galicia y Cantabria y enlaza las principales localidades del área central pero que sufre incidencias casi a diario, prefieren “trenes puntuales” y con un buen servicio a la gratuidad prolongada hasta 2026 en una red que además no conecta con hospitales, campus universitarios, el aeropuerto de Asturias o los polígonos industriales.
Por su parte, el diputado socialista René Suárez ha lamentado que la iniciativa de Foro no buscara debatir sobre Cercanías sino alargar “por mero interés partidista” el debate sobre la polémica de los trenes, un error de gestión “inaceptable” al que el Gobierno asturiano reacción de forma “clara y contundente” y logró compensaciones por el aplazamiento de la construcción de los convoyes.
Para el popular Álvaro Queipo, que ha explicado que su grupo apoyaba la petición de cese de la ministra pero no la negociación de las competencias ferroviarias sin una planificación previa, lo ocurrido responde “a una estrategia deleznable” que buscaba evitar que se vinculase la construcción de esos trenes con un plan de inversiones en cercanías aprobado por el anterior Gobierno del PP.
Desde Ciudadanos, su diputado Sergio García ha indicado que la prolongación de la gratuidad del servicio de cercanías hasta 2026 “no ataja los problemas de raíz” dado que los usuarios seguirán “llegando tarde a clase”, mientras que el portavoz de Podemos, Rafael Palacios, ha indicado que esta “chapuza” prolonga la agonía de una red que perdió tres de cada cuatro viajeros entre 2005 y 2021.
De “prácticamente inservible” ha calificado la actual situación de la red el diputado del grupo Mixto Armarndo Fernández Bartolomé mientras el portavoz de IU, Ovidio Zapico, ha pedido “pasar página y no seguir agarrados a la frustración” por una polémica que, a juicio de su homóloga de Vox, Sara Álvarez, constituye “una mezcla de mentira y de chapuza”.
El pasado día 20 los grupos parlamentarios que sustentan al Gobierno de Cantabria, PRC y PSOE, evitaron ya con su mayoría en el parlamento autonómico la reprobación de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, a la que la oposición consideró “la máxima responsable política de la cadena de negligencias” en la fabricación de los trenes de cercanías. EFE