Oviedo (EFE).- El Gobierno del Principado descarta que el plan de choque que se va a poner en marcha en las estaciones de Itvasa para atajar las listas de espera provocadas por cerca de cuatro meses de huelga vaya a implicar una subida de tasas para los usuarios.
Preguntado sobre este asunto en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno, el portavoz del Ejecutivo autonómico y consejero de Hacienda y Fondos Europeos, Guillermo Peláez, ha afirmado que no hay “ninguna intención de subir las tasas” porque Itvasa es una empresa rentable que obtiene sus ingresos a través de las inspecciones técnicas.
Peláez ha asegurado que el acuerdo alcanzado con la plantilla para la desconvocatoria de la huelga en la sociedad pública encargada de realizar las inspecciones técnicas de vehículos no pone en riesgo la viabilidad de la empresa, “en el sentido de que sea necesario incrementar los ingresos y con ello las tasas”, de modo que es un asunto que “no está encima de la mesa”.
El consejero también ha sido cuestionado por las críticas vertidas desde la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), que ayer denunció que las “cesiones” del Principado ante la plantilla sientan “precedentes peligrosos, mientras no se aborda la cuestión verdaderamente importante, la eficacia del servicio que debe ir ligada a la productividad”.
A este respecto, Peláez ha considerado que hay algunos colectivos que esperaban que el conflicto finalizara de otra forma “más cercanos a sus intereses”, en referencia a una posible entrada de la iniciativa privada en el sector.
Tal y como avanzó ayer, el portavoz del Ejecutivo ha apuntado que ahora se pondrá en marcha “a la mayor brevedad” un plan de choque, que en estos momentos se está negociando con la plantilla, para atajar las listas de espera, que en alguna de las diez estaciones que Itvasa tiene en el comunidad llegan hasta septiembre, con más de 30.000 vehículos afectados.
Peláez ha reivindicado un acuerdo que es positivo y que es fruto de “mucho diálogo” y “mucho esfuerzo para llegar a un punto de entendimiento”, en un trabajo “colegiado y coordinado” de todo el Ejecutivo, “independientemente de quién estuviera sentado en la mesa” con la plantilla, ha remarcado. EFE
