Imagen de archivo de un dron. EFE/Àlex Gutiérrez Páez

Drones, aliados para guardar al ganado del lobo, controlar el riego y promocionar un pueblo

Rebeca Palacios |
Logroño, (EFE).- Los drones se han convertido en los nuevos aliados en el medio rural para vigilar al ganado y cuidarlo de los ataques del lobo, controlar el riego en los cultivos agrícolas en situaciones de sequía y promocionar la oferta turística de los pueblos.


Un grupo de 25 riojanas ha comenzado un curso de pilotaje de drones, organizado por la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR), según ha informado su presidenta en La Rioja, Mila Díez, en declaraciones a los periodistas.

El proyecto “FADEMUR Vuela”, que prevé formar a 500 mujeres rurales de diez comunidades autónomas, es una escuela itinerante de pilotaje de drones con formación telemática, sesiones prácticas y exámenes presenciales tras seis semanas de instrucción.

Tras completar este curso, que es gratuito, las participantes lograrán la titulación de pilotas a distancia de UAS/drones en categoría abierta, A1/A3, A2 y STS01 y STS02, certificado por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).

Además, también obtendrán la certificación de fotogrametría, que proporciona las técnicas para obtener mapas y planos de grandes extensiones de terreno por medio de la fotografía aérea.

Sostenibilidad y digitalización

Ha asegurado que este programa permite aprovechar la “sostenibilidad y la digitalización” como herramientas para arraigar la población en el medio rural y “adaptarse a los nuevos tiempos” en actividades tradicionales como la agricultura y la ganadería.

“Si hay una plaga en un viñedo o se pone enferma una vaca, no es lo mismo empezar a fumigar o buscar el animal por la cara norte de la explotación o por la zona sur. Un dron puede agilizar este trabajo”, ha relatado.

Además, estos aparatos permiten obtener fotografías y vídeos muy creativos para promocionar el turismo rural, las pequeñas bodegas o, simplemente, el paisaje de una zona.

Los cursos los impartirá la escuela de formación ASR, de la empresa Pirineos Drone, que está ubicada en una zona rural de montaña del Valle de Arán (Lérida), ha explicado su responsable, Lara Iglesia, quien ya ha formado a un centenar de mujeres.

Ovejas, cerezos y Cameros

María José Esteban, ganadera de Ventrosa, ha explicado que un dron le permitirá controlar la ubicación su ganado ovino y bovino y “evitar muchos viajes y paseos para cerrar los animales por la noche y soltarlos por la mañana”.

En esta zona del Alto Najerilla y las Siete Villas también podrá vigilar a las ovejas y conducirlas al redil para evitar ataques de los lobos, ha apuntado.

Por su parte, Guadalupe Vicente ha indicado que cuenta con una explotación de cerezos en el municipio de Quel, en la Rioja Oriental, y con los drones podrá controlar qué árboles pueden estar perjudicados o si hay zonas más secas, ya que “desde arriba se ve de otra manera”.

Esta fruticultora ha agregado que los drones permiten obtener imágenes de los cultivos en su finca que después se pueden colgar en su página web o en la del Ayuntamiento del municipio, que “es pequeño, pero tiene muchas cosas que ofrecer”.

En el turístico municipio de El Rasillo, Blanca Rosa Ruiz tiene casas rurales, por lo que ha considerado “muy interesante” poder dar a conocer a los potenciales clientes toda la zona de Cameros, no solo su establecimiento.