Una persona observa las papeletas de los distintos aspirantes antes de depositar su voto este domingo. EFE/J.Casares

Rapariegos (Segovia), último municipio que cerrará el colegio electoral, a las 21.30 horas


Zamora (EFE).- El colegio electoral de Rapariegos, un municipio segoviano de doscientos habitantes, será el último en cerrar las votaciones de este domingo en Castilla y León, a las 21.30 horas, una hora y media después que el resto, debido a una incidencia surgida con las papeletas electorales de uno de los partidos que ha obligado a retrasar hasta las diez y media el inicio de la votación.


Además, también se prolongará la votación 45 minutos más allá de las 20 horas en el colegio electoral de Candelario (Salamanca) debido a un conflicto entre si debía presidir la mesa electoral el suplente primero o el segundo y de 30 minutos en una mesa del colegio público San Cristóbal de Colon de Valladolid, también por la tardanza en comenzar la votación.


La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha dado a conocer estas incidencias del comienzo de la jornada de votaciones, en el que también ha habido anécdotas como una urna sellada con silicona que se limpió a tiempo para la votación en la provincia de Zamora o el encierro desde fuera de los miembros de una mesa electoral en la provincia de León que obligó a llamar a un cerrajero

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones. EFE


Otra incidencia aún no resuelta se dio en la localidad de Almenar de Soria, donde aparecieron en la cabina papeletas con las cruces ya hechas a los candidatos de un partido, en uno de los municipios que al ser de menos de 250 habitantes se vota en listas abiertas.


En Rapariegos, el error que ha retrasado la votación se debió a que en las papeletas de la candidatura del PSOE aparecía un candidato de más, cinco en vez de cuatro.


Esa incidencia únicamente se registró en las papeletas impresas por el propio Ayuntamiento para el día de las votaciones y no en las entregadas a domicilio previamente mediante los envíos por correo postal que hacen los partidos.
La junta electoral ha acordado que la votación se llevase a cabo y se mantuvieran en la cabina las papeletas erróneas pero se informase “in situ” a todos los votantes de que únicamente son válidos cuatro de los nombres de esa candidatura.

En Candelario (Salamanca), el problema surgió por el conflicto sobre si debía presidir la mesa el suplente primero o el segundo, ya que el presidente había excusado su ausencia y al primer suplente no se le había acreditado debido a que era mayor de 65 años y habían pensado que por ello no iba a acudir para formar parte de la mesa.


Sin embargo, sí lo hizo aunque finalmente fue el suplente segundo el que asumió las funciones de presidente de mesa.

Encerrados con llave


La anécdota más curiosa de la jornada se ha producido en San Andrés del Rabanedo (León), donde le conserje de uno de los colegios electorales se dejó las llaves puestas en la puerta por fuera cuando los integrantes de la mesa accedieron al centro.
Alguien los encerró con llave y fue necesario llamar a un cerrajero para que les abriera, algo que hizo a tiempo para abrir el colegio electoral a su hora, según ha detallado la delegada del Gobierno.


Otra anécdota se ha producido en el municipio burgalés de Jaramillo Quemado, donde tan solo había cinco electores en el censo y cuatro de ellos votaron puntuales a primera hora y el quinto lo había hecho por correo, pero como el correo aún no había llegado fue necesario esperar a ese voto anticipado para poder cerrar la mesa y proceder a realizar el escrutinio sin tener que esperar a las ocho de la tarde.


Junto a estas anécdotas se han producido otras como tener que ir a buscar a su domicilio a algún miembro de mesa para que ésta pudiera constituirse en un inicio de votaciones que, en general, ha resultado con escasas incidencias y nota dominante de normalidad en Castilla y León. EFE